La Comisión Especial de Asuntos Alimentarios y la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) realizan “Foro sobre Obesidad Infantil y consumo” para buscar soluciones ya que México ocupa el primer lugar de este padecimiento en menores y el segundo en adultos, a nivel mundial.
Al inaugurar el evento, la secretaria de la comisión, Julisa Mejía Guardado recordó que la obesidad infantil existe en el país, porque hay poca información de nutrición y mucha influencia con la comercialización de productos.
Indicó que actualmente la alimentación de los mexicanos ya no es comida natural sino procesada, por lo que exhortó a los adultos a informarse en materia de nutrición para alimentar correctamente a los niños.
Destacó que hay estudios que revelan que las personas en pobreza gastan el 90 por ciento de sus ingresos en la alimentación, a diferencia de la clase alta que destina alrededor de 10 por ciento de sus ingresos.
“La disparidad en la utilización de los recursos económicos es porque las personas de clase alta que tienen mayor información nutricional y gastan menos porque tratan de alimentarse de la mejor manera”, explicó.
Mejía Guardado adelantó que la Comisión Especial de Asuntos Alimentarios trabaja en una Ley de Acceso a la Alimentación para garantizar la seguridad alimentaria del país, la cual abarca desde la producción hasta la información en nutrición.
La también secretaria de esta instancia legislativa, María Esther Garza Moreno, destacó que la legislación promoverá el cambio de hábitos alimenticios.
Consideró que es posible lograrlo si los tres órdenes de gobierno trabajan unidos. “Con esta ley, que implica muchas disciplinas, trataremos de detener la obesidad infantil, para que la gente aprenda a alimentarse”, dijo.
El director general de Promoción a la Salud de la Secretaría de Salud (SSA), Eduardo Jaramillo Navarrete, indicó que la estrategia del gobierno federal es cambiar los patrones de consumo y de estilos de vida de la sociedad mexicana.
“La obesidad y las enfermedades crónicas no transmisibles como la diabetes son factores de riesgo y sus condiciones son modificables, no son inmanentes a la biología del individuo, aunque haya factores genéticos que predisponen a estas condiciones. Si cambiamos conductas e internalizamos estilos de vida saludables, puede lograrse”, afirmó.
El funcionario federal señaló la importancia de una cultura de consumo responsable e informada, tal como lo promueve la Profeco, así como Además de la corresponsabilidad de la industria en cuanto al etiquetado y la publicidad de los productos.
En su momento, la especialista en nutrición de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) México, Delhi Trejo Hernández, explicó que debe de haber alternativas saludables para la alimentación de la gente en pobreza. “Con la mitad de mexicanos en pobreza se tienen que dar alternativas para hacerle saber a la gente que hay opciones saludables a bajo costo y que no necesariamente son las cinco frutas y verduras siempre”, dijo.