Por Guillermo Pimentel Balderas
El PRI rechazo estar involucrado en un presunto fraude entre particulares, como lo señaló José Aquino en diversos medios de comunicación, e informó que Luis Videgaray, Erwin Lino, David López y Roberto Calleja presentaron, el día de hoy ante la PGR, las denuncias correspondientes por la utilización indebida de su nombre.
Afirmó que la denuncia interpuesta por la empresa de televisión estadounidense Frontera Televisión Network (FTN) contra miembros del equipo de campaña de Peña Nieto es una vulgar extorsión.
“El PRI no ha celebrado contrato alguno para promover candidaturas en el extranjero y tampoco pagó dinero con este propósito. Asimismo, no se ha solicitado ni recibido dinero con este fin”.
Por lo tanto, dijo que el Comité Ejecutivo Nacional ampliará la denuncia por el uso indebido del nombre del PRI y el de su candidato a la Presidencia de la República para obtener un lucro ilícito.
“Solicitamos se investiguen de inmediato, y a fondo, las cuentas de banco referidas por el señor Aquino en los medios de comunicación, así como el origen y destino de esos recursos, y hacerlo del conocimiento de la opinión pública a la brevedad”.
Con respecto a las declaraciones de José Aquino en diversos medios de comunicación, detalló que en el mes de noviembre de 2011, el señor Alejandro Carrillo Garza Sada contactó al equipo de precampaña presidencial del PRI con el propósito de ofrecer un proyecto de comunicación para promover la candidatura presidencial de este partido en los Estados Unidos de América.
Entonces, la propuesta fue rechazada, ya que resultaba absurdo el planteamiento tanto por el monto solicitado como por el hecho de que la ley prohíbe promover candidaturas fuera del territorio nacional.
Sin embargo, cinco meses después, el señor Francisco Javier Torres, quien se ostentó como funcionario del Banco Inbursa y como representante del señor José Aquino, contactó al PRI con el propósito de solicitar la cantidad de 5 millones de dólares a cambio de no detonar, lo que a su juicio, sería un escándalo que perjudicaría la candidatura presidencial del PRI. Para tal efecto, fijó como ultimátum el 4 de mayo pasado para que se le entregara el dinero solicitado, lo que desde luego fue rechazado por tratarse de una vulgar extorsión.
“El día de ayer, 13 de junio, fuimos enterados por el equipo de trabajo de un programa radiofónico, de la existencia de una demanda en los Estados Unidos de América en la que perversamente se involucraba a diversos miembros del equipo de campaña”.
Y, en virtud de lo anterior, especificó, el PRI presentó ayer una denuncia ante la PGR para que se investiguen los hechos presumiblemente constitutivos del delito de extorsión.
“De la información obtenida a través los medios de comunicación, es claro que estos acontecimientos tienen visos de un fraude entre particulares al que burdamente se pretende convertir en un asunto político para perjudicar la imagen del PRI durante el proceso electoral. Asimismo, se desprenden conductas presumiblemente constitutivas de delito”