El comisionado del Instituto Nacional de Migración (INM), Ardelio Vargas Fosado, afirmó ante diputados federales que es necesario fundar un Centro de Control y Confianza al interior de esta institución, si se quiere crear una nueva generación de agentes migratorios honestos y mejor preparados.
“Es fundamental porque los vicios que traemos atrás no permiten desarrollar una visión de respeto irrestricto a los derechos humanos de los migrantes, independientemente de su situación legal”, subrayó.
Ante este reconocimiento, la presidenta de la Comisión de Asuntos Migratorios de la Cámara de Diputados, Amalia García Medina, manifestó su preocupación y le dijo al funcionamiento del INM que la seguridad de los migrantes y garantía al respeto de sus derechos humanos y de sus familias es una prioridad, porque “México es un país de tránsito, destino, retorno y origen de migrantes”.
Señaló que en las estaciones migratorias subsisten prácticas de abuso, maltrato, falta de calidad y cantidad de alimento; así como el tiempo de retención en estas estaciones, por lo que se debe enfatizar la información que se dé a los migrantes sobre sus derechos y revisar las condiciones de las estaciones, para evitar el hacinamiento.
Además, destacó que existe el reto de no criminalizarlos. “Es un problema que debe formar parte de las políticas de los Estados nacionales en relación con su seguridad interna, pues los trabajadores migrantes indocumentados no son un riesgo a la seguridad interna del país, lo cual es un enfoque equivocado”.
Afirmó que se requiere una política de Estado que ponga en el centro su no criminalización, así como establecer una relación con los países de origen para ver qué políticas y acciones pueden desplegar conjuntamente para generar una zona de crecimiento y desarrollo común donde haya inversión productiva, empleo, educación, salud, oportunidades y condiciones para que todo mundo crezca, en lugar de políticas persecutorias y policiacas.
Propuso que el INM elabore protocolos de actuación con los migrantes que establezcan cuál debe ser el trato y la conducta con mujeres embarazadas; adultos mayores; enfermos que requieren atención médica; con niños, niñas y adolescentes, lo cual implicará la colaboración con otras instituciones.
Sostuvo que se requiere que desde el Congreso se aprueben recursos presupuestales para dar esta atención a los migrantes “de manera que no nos quedemos en propuestas y señalamientos”.