La trata de personas es uno de los grandes crímenes de la humanidad, ya que las personas son explotadas sexualmente y mantenidas en estado de servidumbre o esclavitud en fábricas, o capturadas para formar parte de la delincuencia organizada, pero a pesar de ello en el Senado todavía no se dictamina la ley que permitirá combatir ese fenómeno con eficiencia.
El líder de los senadores panistas, Fernando Herrera Ávila, alertó de que en México se están produciendo fenómenos sociales que agudizan la preocupación de la sociedad en su conjunto, como la desaparición forzada de personas.
Y para dar un ejemplo de la forma en que se propaga este problema en el país, citó dos casos ocurridos en mayo de este 2015.
En el primero, dijo el legislador, desaparecieron en Chilapa, Guerrero, 30 individuos, al parecer levantados por narcotraficantes; y, en el segundo caso 11 pescadores sinaloenses que pretendían llegar a Sonora para trabajar en campos de producción de uvas, fueron levantados y desaparecidos.
“No son casos aislados, pues asuntos como éstos se repiten en cada uno de los estados y se pierden ante la indiferencia de las estadísticas”, acusó.
Añadió que quienes padecen de este flagelo son obligados a realizar trabajos como sicarios o en la producción, transporte y venta de drogas, y son utilizados para el tráfico de órganos y embarazos forzados.
Señaló que México es punto de origen, tránsito y destino de la trata de personas a lo largo y ancho de todo el continente y que la trata es el segundo delito en importancia económica luego del tráfico de drogas.
“El problema es sumamente complejo y no es fácil de resolver. Conscientes de las lagunas y deficiencias de la actual Ley Contra la Trata de Personas, en febrero de 2014 las senadoras y senadores aprobaron una iniciativa para reformarla, con diversas puntualizaciones que llevaban a tipificar conductas y definir de una manera muy clara cuáles eran los delitos que se tendrían que perseguir”, recordó.
El dictamen, prosiguió Herrera Ávila, fue producto de un trabajo responsable que plantea modificar desde el mismo nombre de la propia ley, hasta incorporar medidas contundentes para prevenir y sancionar este delito.
Detalló que la minuta fue aprobada con modificaciones en la Cámara de Diputados, pero se encuentra pendiente de dictaminar y aprobar en comisiones del Senado de la República desde el pasado 4 de diciembre.
“La ley debe ser precisa y explícita para que el Ministerio Público tenga perfectamente claro qué significa la trata y tener elementos para acreditar el delito”, remarcó.