La Comisión Nacional de los Derechos Humanos, que preside Raúl Plascencia Villanueva, inició investigación por el caso de una mujer de 25 años de edad, con nueve meses de embarazo, que dio a luz en el baño del Hospital Central "Ignacio Morones Prieto", en San Luis Potosí.
Asimismo, indaga presuntas violaciones a los derechos humanos cometidas en agravio de una dama, a quien se le impidió donar sangre cuando se negó a la práctica de un tacto vaginal por parte de médicos del Hospital General de Yajalón, del estado de Chiapas.
En el primer caso, la CNDH informó que a las 4:00 horas del sábado 10 de mayo, la agraviada acudió al nosocomio - Hospital Central "Ignacio Morones Prieto", en San Luis Potosí- con dolores de vientre, en compañía de su madre; en el área de recepción les indicaron que esperaran, por lo que se retiraron a la sala de espera.
Una hora después, los dolores fueron más agudos y sintió la necesidad de ir al baño; posteriormente, ante los gritos de la joven, personal del hospital se movilizó y acudió en su ayuda, pero el bebé ya había nacido.
Por instrucciones del Ombudsman nacional, visitadores adjuntos de la CNDH se trasladaron al hospital, donde se entrevistaron con la víctima y su madre, al tiempo que requirieron a la autoridad de salud involucrada los informes correspondientes; reportaron buenas condiciones de salud de la joven y su hijo.
En el otro caso, en hospital de Chiapas, la CNDH tras conocer del caso a través de los medios de comunicación, visitadores adjuntos de este Organismo nacional, acudieron al municipio, a efecto de recabar evidencia suficiente que permita acreditar la presunta violación a los derechos humanos, así como para entrevistar a la agraviada, para en su momento, determinar lo que conforme a derecho corresponda.
Esta Comisión Nacional considera que la situación de vulnerabilidad en la que se encuentran las mujeres, permanece arraigada en zonas predominantemente indígenas, toda vez que además de la precariedad de sus circunstancias, están expuestas a padecer cualquier tipo de violencia en razón de su género, ya sea física, sexual o psicológica, mediante diversas manifestaciones, tales como el hostigamiento y abuso sexual.
Esta situación se agrava cuando tales actos son cometidos por un médico, quien a pesar de tener calidad de garante, ejecuta actos que pudieran traducirse en violaciones a los derechos humanos a la libertad sexual, al trato digno y a la igualdad.
Este Organismo público autónomo considera que la protección de la salud es un derecho humano elemental para todas las personas y particularmente para las mujeres en estado de gravidez, que las coloca en situación de especial vulnerabilidad.
La CNDH reitera que para contribuir a la consolidación de los derechos humanos en nuestro país, se debe garantizar el acceso de la población a los servicios de salud con calidad y calidez.
Tras concluir las investigaciones y después del análisis y la valoración de las evidencias de los casos, esta institución emitirá la determinación que conforme a derecho corresponda.