El presidente de la Comisión de Economía de la Cámara de Diputados, Mario Sánchez Ruiz, denunció que no son verificadas ni certificadas el 62 por ciento de las normas oficiales aplicables no son aplicables en México, lo que requiere de contar con organismos adecuados a efecto de que las empresas brinden productos de primera calidad.
En reunión de trabajo con representantes de la Entidad Mexicana de Acreditación (EMA), el legislador precisó que es indispensable revisar la Ley Federal sobre Metrología y Normalización, con el fin de ver si es vigente con las actividades actuales.
“De ahí la importancia de reunirnos con EMA para saber qué creen ellos que tiene que modificarse y obviamente pasar a revisión de la Comisión, ya que las actividades cambian constantemente, como es el caso de las telecomunicaciones y redes sociales”, precisó.
Destacó que aumentar la competitividad del país debe ser la meta fundamental de los diputados, por lo que “tenemos que coadyuvar con el Gobierno y la Secretaría de Economía y las dependencias de gobierno involucradas en actividades comerciales, para que México vincule las grandes empresas exportadoras con los pequeños y medianos mercados nacionales”.
Resaltó que sólo el 38 por ciento de las normas son verificadas y certificadas, lo que resalta la importancia del trabajo que debe realizar el Congreso para lograr el acceso al 100 por ciento de estas normas.
Sánchez Ruiz destacó la existencia de instituciones y empresas que certifiquen la calidad de lo que se vende y si se cumple con lo especificado en las normas de cada producto, para mejorar la competitividad.
“Todos podemos ser profesionales, pero si contamos con un instituto que supervise que los productos sean de calidad, como empresario te exiges una mayor supervisión, además de que la sociedad necesita estar segura de lo que compra, su volumen, calidad y características de lo que ofrecen”, acotó.
Hoy en día, agregó, “el 70 por ciento de lo que exportamos se importa, y eso se debe a que los productos que vendemos no cumplen con la calidad que requieren; si nos enfocamos a dar mayor competitividad, cada vez el grado de los productos exportados será más grande”.
Añadió que la intención es dar a conocer a los legisladores la función y conformación de EMA, a fin de dar certeza a unidades económicas sobre la calidad, metodología y eficiencia de los productos que se elaboran y venden en México.
En su turno, la directora general de EMA, María Isabel López Martínez, dijo que es necesaria la apertura comercial para elevar la competitividad y eficiencia de los empresarios.
Explicó que con un sistema de normalización se evitaría la competencia desleal y aumentaría la competitividad y permanencia de los mercados.
“Estamos convencidos de que la productividad, calidad y eficiencia de las empresas se han convertido en elementos de subsistencia en los mercados, por lo que deben estar coordinados los sectores público y privado”, detalló.
Enfatizó que son 11 secretarías de Estado las que emiten las normas oficiales mexicanas, pero si no se cuenta con las adecuadas, o un sistema para evaluarlas, los productos se detendrán en la frontera porque no cumplen con las reglas de calidad.