Por Guillermo P. Balderas
Pequeños transportistas del país aseguran que el Gobierno Federal pretende eliminarlos y se quejan de que, cansados de tanta extorsión y constantes incrementos a los combustibles, los están orillando a reclutarse a las filas de los desempleados o del crimen organizado.
Trabajadores del volante miembros de la Confederación Nacional de Transportistas, Similares y Conexos de la República Mexicana “Lic. Adolfo López Mateos”, advierten lo anterior porque “el Gobierno de Felipe Calderón ha tomado la determinación de perseguirnos como delincuentes. Esto, a los que tienen un camión con partes americanas o es de procedencia extranjera, al considerarlo de contrabando”.
Y añaden: “No conforme con esto, de ser perseguidos por la Secretaria de Hacienda y quitarnos el camión, se nos presenta, a los transportistas, ante el Ministerio Público Federal como si fuéramos criminales y nos cobran multas hasta tres veces el valor comercial del automotor”.
Consideran que la clara intensión del Gobierno Federal es eliminar al pequeño transportista. Los persiguen como contrabandistas y se les aplica la “Ley” como si fueran criminales o delincuentes.
Dicen que no es justo que los traten de esta manera cuando el Gobierno Federal ha propiciado la debacle del gremio del transporte con los incrementos indiscriminados de los combustibles; casetas caras (a partir del sábado 17 de diciembre, el pago de peaje en las casetas en las carreteras que administra Caminos y Puentes Federales (Capufe) tuvo incrementos que en algunos casos fue mayor a 5 por ciento); además de soportar fletes mal pagados.
Edmundo Delgado, dirigente del gremio, aseguró que el pequeño transportista no tiene la capacidad económica para comprar un camión nuevo y consideró que con esta actitud del Gobierno Federal y con esta Ley, los orillan a las filas de los desempleados o del crimen organizado.
Dijo que este no es el futuro que quieren los pequeños transportistas, y lamentó que haya todavía un Gobierno autoritario, insensible y corrupto. Hizo un llamado a los transportistas del país ante esta grave situación, para defender su patrimonio, levantar la cabeza y no seguir cruzados de brazos o tolerando las injusticias por parte del Gobierno, porque, subrayó: “es tiempo de tener las agallas suficientes para defendernos”.
Bueno, ante este llamado, se espera una respuesta firme y contundente de parte de los hombres-camión, ante tantas humillaciones que han sufrido y sufren, al igual que los transportistas campesinos ante gobiernos estatales panistas que les decomisan sus unidades de procedencia extranjera, que adquieren por baratas y que no pueden adquirir en México por lo caras que son.