*Tercer secretario en tres años sin política hacendaria
Señalamos la urgencia de estabilizar la política hacendaria en México, debido a que en tres años del actual gobierno se ha rotado al titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
El tercero en menos de tres años de esta administración y en un momento en el que la salud y la pobreza están mal atendidas, la inseguridad está en su peor momento, la corrupción es escandalosa, la economía no crece, el empleo es insuficiente y mal pagado.
Además, no hay estímulos a la inversión, la inflación vuelve a golpear y el gasto público se destina más a proyectos no prioritarios.
El PAN se preparó para el debate que, en sesión del Periodo Extraordinario, analizó uno de los asuntos más importantes para la LXIV Legislatura del Congreso de la Unión.
Es la tercera propuesta de titular de la SHCP que hace el Poder Ejecutivo Federal a la Cámara. Anteriormente lo hizo con Carlos Urzúa Macías para el primer año, Arturo Herrera para el segundo y Ramírez de la O ahora para el tercero, en julio de 2021.
Advertimos que el nuevo titular de la SHCP no ha tenido ningún cargo público ni experiencia en materia contable, financiera o presupuestal gubernamental.
Las y los diputados del PAN demandamos estabilidad en el manejo de las finanzas públicas, ya que la experiencia en este campo también ha sido accidentada en este gobierno.
El primer secretario debió renunciar denunciando que en esta administración se han tomado decisiones de política pública sin el suficiente sustento y luego de los encontronazos oficiales por la mala elaboración del Plan Nacional de Desarrollo.
Por ello urgimos a realizar una evaluación a fondo del Plan Nacional de Desarrollo y sus programas.
Mi partido será exigente con el nuevo funcionario federal para que en la propuesta del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2022 se atiendan las verdaderas prioridades del país: salud, educación, ciencia, economía, campo y medio ambiente, seguridad, Estado de derecho y combate a la corrupción.
Pondremos énfasis en que México transita por un mercado laboral predominantemente informal, la inversión es insuficiente y enfrentamos brechas sociales que obligarían a la instrumentación de políticas públicas que permitan tener una recuperación económica integral e incluyente.
No hay tiempo para más improvisaciones en materia económica, por ello se requiere Estado de Derecho, contrapesos republicanos y ciudadanía consolidada.