*Nada le regateamos al Ejército para el cumplimiento de sus tareas
Nosotros nunca hemos regateado el apoyo al Ejército, ni nuestra postura ha sido ambigua. Nosotros vemos a una institución siempre solidaria con los mexicanos cuando hay emergencias, que tiene un amplísimo reconocimiento social; en cualquier encuesta está por encima del 85 por ciento de aceptación y de confianza.
La seguridad pública del país no puede estar en mejores manos que del Ejército mexicano, nuestras Fuerzas Armadas y también de la Marina.
Por eso aprobamos la adscripción de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional, porque consideramos que es una manera de preservar esta institución, blindarla de la corrupción, del manejo de la delincuencia organizada y, por esa razón, consideramos que era muy oportuno.
Sin embargo, se deben realizar otras tareas legislativas importantes para construir el edificio de participación de las Fuerzas Armadas en tareas que van, desde la soberanía nacional, la defensa del territorio, la protección civil y, desde luego, la seguridad pública de nuestra nación.