*Buscamos que los magistrados sean más productivos

Buscamos reformar el artículo 43 de la Ley Orgánica del Tribunal Federal de Justicia Administrativa para fijar un límite el tiempo en el cargo de los magistrados a un término de seis años para un primer periodo, con posibilidad de acceder a un segundo periodo de nueve años.

El objetivo es que los magistrados sean más productivos y lleven a término, de manera expedita, los asuntos que atiendan en su jurisdicción, reduciendo el rezago en la resolución de controversias.

Además, que la inclusión de un procedimiento de ratificación para los magistrados del Tribunal Federal de Justicia Administrativa puede reducir el riesgo de corrupción en el ejercicio del cargo.

El proceso de ratificación por parte del Senado de la República brinda incentivos a los magistrados para sustentar de manera robusta y apegada a derecho sus actuaciones y resoluciones, ya que estarán consientes en todo momento, del proceso de examinación del que serán objeto, en el caso de que aspiren a un segundo periodo de encargo, deberán rendir cuentas sobre sus acciones al Senado de la República, a través del proceso de ratificación.

Los Magistrados de Sala Especializada en materia de Responsabilidades Administrativas durarán en su labor diez años y bajo ningún caso podrá ser prorrogable.

La labor jurisdiccional que realizan los magistrados pone en juego, no sólo la capacidad profesional, sino los intereses y los derechos de las partes involucradas en los diferendos de los cuales conocen.

La modificación a su periodo de ejercicio es necesario para la rendición de cuentas por parte de los juzgadores y da apertura al escrutinio público y el establecimiento de controles democráticos, deseables y justos.

El marco que da sustento al ejercicio de responsabilidad de los juzgadores radica en gran medida en la interpretación que hacen de los hechos para resolver los casos y en los elementos, tanto administrativos como procedimentales, para asegurar un entorno más propicio en la elaboración de las sentencias.

Esta medida brindará certeza a todos los integrantes del sistema del Tribunal Federal de Justicia Administrativa sobre la temporalidad en la apertura de oportunidades para acceder a los cargos de magistrado.

Fomentará la cultura meritocrática en el proceso de selección, disminuyendo la ocurrencia de conflictos en estos procesos.