*Situaciones que generan preocupación en el Congreso

He enviado un oficio a la presidenta de la Mesa Directiva, la senadora Ana Lilia Rivera Rivera, en donde le expongo algunas situaciones que generan preocupación, ya que he sido víctima de ataques cibernéticos que se comenzaron a realizar desde septiembre de este año, pero que, en la sesión del miércoles 8 de noviembre, es decir, el miércoles de la semana pasada volvieron a ocurrir.

Tengo diversas páginas de internet, aplicaciones que son las que utilizo para llevar a cabo mi función legislativa, y también para gestionar las actividades de mi equipo.

Y sucede que en la noche del 8 de noviembre comenzamos a recibir otra vez unos ataques. Y al día siguiente, es decir, el 9 de noviembre, dos personas que colaboran conmigo sus celulares fueron atacados, y también fueron hackeados y, por lo tanto, vulnerada toda la información que contenían estos celulares.

Esto lo menciono, porque en el único lugar en el que he accedido a los servidores en donde tengo alojadas estas aplicaciones fue en el domicilio en donde está mi oficina particular y aquí en el Senado de la República.

Es decir, a través de mis dispositivos personales ingresé a la red de senado digital y pues son las únicas dos redes en donde desde mi punto de vista pudo verse vulnerada la seguridad de mis dispositivos.

Por eso presenté el oficio a la Mesa Directiva en la que solicito, a través de la presidenta, se instruya a quien corresponda, para que informe, la Secretaría de Servicios Administrativos, la Secretaría General de Servicios Administrativos, cuáles son las acciones que realiza para garantizar la seguridad de los dispositivos que utilizamos, no sólo las Senadoras, los Senadores, sino también el personal que labora aquí.

Y, también, cuáles son aquellas medidas que están tomando para garantizar que no vamos a ser objeto de ninguna intromisión en estos datos y también de espionaje.

Es una situación que consideré de suma relevancia, por supuesto que la semana pasada presenté ya las denuncias correspondientes ante la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, quien ya realiza las investigaciones correspondientes.