*Se pasó de cínico Salgado Macedonio
*Soberbia avalada por López Obrador
Con brutal cinismo y creciente indignación contra la 4-T, el candidato de Morena al gobierno de Guerrero, Félix Salgado Macedonio, formalizó su registro de aspirante, posición que dos días después fue fortalecida por el presidente Andrés Manuel López Obrador, al bañarlo de soberbia.
“Quiero hacer un reconocimiento público a la mujer guerrerense y los jóvenes, porque son el motor de la cuarta transformación”, incrédulas palabras textuales pronunciadas el lunes pasado por el senador con licencia Salgado Macedonio.
Como se sabe, este polémico y desprestigiado personaje morenista es políticamente impulsado y apoyado a muerte por un sector del partido Morena, organismo propiedad del presidente López Obrador.
Y también como se sabe, Salgado Macedonio ha tenido una trayectoria pública similar a muchos neoliberales que tanto repudian los morenistas, por los escándalos que ha protagonizado, no solo en el estado de Guerrero, sino en la capital del país con alcances de difusión nacional.
De igual forma como se sabe, don Félix fue senador en 1997, época en que fue captado por los noticieros de televisión cayéndose de borracho queriendo golpear a los policías que lo sorprendieron escandalizando en la vía pública del entonces Distrito Federal.
Por ello ahora, con esa histórica declaración de reconocer a la mujer cuando tres de ellas lo acusan de violador, no queda otra más que apoyar a quienes desde todos los frentes, principalmente feministas, le están enderezando todo tipo de improperios por haber llegado al grado de pasarse de cínico con tanta frescura y con aparente seguridad que será el próximo gobernador de Guerrero.
Pero dos días después esta posición se entendió con lo ocurrido en la mañanera del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien no se anduvo por las ramas y con increíble franqueza dejó en claro su apoyo a Salgado Macedonio, postulado por Morena candidato a gobernador de Guerrero, porque “el pueblo no es tonto”.
Años después fue candidato al gobierno del municipio de Acapulco y ganó, pero durante los tres años que estuvo en el cargo registró hechos de escándalo de todos los niveles y como dice Jesús Ramírez Cuevas el jefe de prensa de López Obrador, un mal gobierno también es corrupción.
Bueno, pues ahora es candidato por tercera ocasión a la gubernatura de Guerrero y aun cuando ya dieron la cara cinco mujeres a quienes Félix Salgado Macedonio violó, dos de ellas cuando eran menores de edad, y aun cuando cientos de mujeres que militan en Morena, muchas de ellas diputados locales y federales, se dice, de acuerdo con versiones que captan nuestros sabuesos informativos, que de Palacio Nacional salió la orden de acallar protestas, trátese de quien se trate, porque la 4-T necesita gobernar ese estado con el acusado…
Como se aprecia, a nadie de los conspicuos morenistas les importó la reacción de protesta de sus propios y propias militantes del partido y solo se escucha la voz caprichosa del mandamás que impone a costa de lo que sea y pésele a quien le pese…
Y por ello es de repetir lo que dijo Ramírez Cuevas en declaración al periódico Basta, gobernar mal también es corrupción y aquí es donde cabe la pregunta ¿eso es transformar? ¿así don Andrés pretende comparar las anteriores reformas históricas, esas sí auténticas por los alcances sociales que las guiaron y aterrizaron?...
Que quede para la reflexión…