*Si hay encuestas y no le favorecen
La encuestadora Consulta Mitofsky de Roy Campos, quien fue de los primeros que antes de las elecciones presidenciales de julio del 2018 dieron por hecho el triunfo del morenista Andrés Manuel López Obrador, ahora reporta que el mandatario está perdiendo simpatías entre el pueblo al registrar continúa baja de aceptación por 15 semanas consecutivas.
Como se sabe, esta empresa dedicada a la investigación e interpretación de la opinión pública recopila semanalmente datos que ayudan a entender el pulso de la gente en las redes sociales, a quienes López Obrador en su momento llamó “benditas” porque consideró que le ayudaron a lograr su triunfo electoral.
Mitofsky no perdió de vista la contundencia con que el actual presidente acaparó la atención del electorado nacional, pero también se dio cuenta que pronto comenzaron las manifestaciones de rechazo a algunas de las decisiones que estaba tomando en la conducción del país y se dio a la tarea de dar seguimiento a lo que inició durante el proceso electoral del 2018.
Así fue como desde la primera semana del 2020 se hizo cada vez más notorio el rechazo y fue aumentando en la medida en que también crecía el temor por lo que estaba ocurriendo con el temido coronavirus.
Los datos obtenidos por la encuestadora registran que en la primera semana de enero la aprobación popular de AMLO estaba en 58.7% y hoy está en 46.5 por ciento, lo que quiere decir que en casi tres meses y medio el inquilino de Palacio Nacional perdió 12.2% de aprobación, derivado de los momentos coyunturales por los que ha pasado en lo que va de su sexenio.
El desacuerdo de la gente con el presidente se agudizó en la primera semana de este año, cuando tenía un 41.2%, pero en la semana 15 el desacuerdo se elevó al 52.8 por ciento, lo que significa que 11.6% más de personas no lo apoyan en las decisiones que ha tomado en distintos momentos importantes.
La encuesta también revela que en la semana 13 fue el momento crítico de la evaluación pública al presidente, pues fue cuando su nivel de aprobación y desaprobación estuvieron casi a la par, pero después de eso las encuestas no han vuelto a estar a su favor y por el contrario, aumenta su rechazo.
Lo anterior se publica todos los días que circula el periódico El Economista en la Ciudad de México, de lunes a viernes, y explica que la #AMLOTrackingPoll se trata de una medición digital de la función pública.
En este sentido, el director de Mitofsky fundamenta que la epidemia del coronavirus ha estado afectando seriamente el apoyo a López Obrador, tanto como el panorama económico nacional, pero no es lo único que ha mermado su popularidad, lo que se refleja en el hecho de que en marzo del 2019 tenía casi 80% de aceptación; sin embargo, distintos fenómenos específicos han impactado negativamente en su imagen.
Ejemplos de ello son el “culiacanazo”, la rifa del avión presidencial que no se va a rifar, el casi nulo reconocimiento de las consignas feministas, el sangriento incremento de la violencia, su reunión con la señora Consuelo Loera, madre de “El Chapo”, y la reacción lenta ante la pandemia del Covid-19.
Son elementos que han caracterizado a la 4-T que también está inyectando incredulidad y fundadas dudas de que logre empoderar a los pobres y empobrecer a los ricos, lo que constituye, en la mente de López Obrador, auténtica intención de encabezar una lucha de clases imposible de coronar en estos tiempos de globalidad sistematizada.
Entre algunos morenistas conspicuos se escuchan reconocimientos en corto en el sentido de que la opinión pública comenzó a valorar de manera negativa al presidente, a partir del fallido operativo del 17 de octubre del 2019, cuando elementos de la Guardia Nacional y de la Secretaría de la Defensa Nacional aprehendieron y dejaron libre a Ovidio Guzmán López, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán.
Este episodio estuvo protagonizado por el Cártel de Sinaloa, cuyos elementos desataron el caos en Culiacán para que dejaran en paz a su jefe y lo lograron luego de que numerosos sicarios atacaron en modo aleatorio en distintos puntos de la capital de ese estado del norte de México.
Y esto, a querer o no, al día siguiente se reflejó con notable claridad en la baja que sufrió López Obrador entre sus simpatizantes, lo que se agudizó con mayor claridad el 8 de marzo de este 2020, cuando desdeñó la multitudinaria marcha conmemorativa al día mundial de la mujer, al tiempo que promocionó la confusa rifa del avión presidencial para desviar la atención de las protestas femeninas.
A todo lo anterior se debe sumar el aumento de los feminicidios y casos como los de Ingrid Escamilla y la pequeña Fátima que acaparaban la óptica mediática en las redes sociales, hechos que el presidente también desdeñó y continuó entusiasta con su difusión de la rifa del avión.
Es, pues, un escenario que justifica los resultados que ya no favorecen al inquilino de Palacio Nacional en cada vez más encuestas.
Que quede para la reflexión, porque se vienen cosas muy interesantes.