Muy comentada está en los desayunaderos políticos de la Ciudad de México esa postura del presidente Andrés Manuel López Obrador sobre lo que ocurre en Michoacán…
Y es que don Andrés se aventó la siguiente puntada en su mañanera del lunes pasado: “Los hechos ocurridos el fin de semana en Michoacán son solo propagandísticos, porque no pasaron a mayores y ya está totalmente controlado y la calma volvió a la entidad…
“Lo de Michoacán ya se está atendiendo. Fue un acto también, más que nada publicitario, propagandístico. Tomas, quemas de vehículos, dos incendios en Oxxos y ya, básicamente. Afortunadamente, nada de violencia en cuanto a pérdidas de vidas humanas…
“Hay algunos detenidos. Intervino la Guardia Nacional con el apoyo de la Secretaría de la Defensa, las policías estatales. Esto se dio básicamente en tres municipios, en Buenavista, en Apatzingán, creo que Uruapan, y ya se recobró la paz, la tranquilidad”…
El repudio entre mucho pueblo no se hizo esperar, porque hasta allende las fronteras se sabe de la prologada inestabilidad que sufren los habitantes de esa entidad y de ahí que las palabras del inquilino de Palacio Nacional sacaron ronchas de odio y expresiones que ya se puede usted imaginar, avispado y grilloso lector…
Que quede para la reflexión…