En días pasados, el presidente Andrés Manuel López Obrador soltó algunas lágrimas porque, según dijo, tampoco el periódico Excélsior lo quiere, a pesar de que este medio informativo escrito no se ha mostrado tan duro en mostrar la realidad de la mal llamada 4-T…

Y tal vez por ello hoy miércoles este otrora importante periódico publicó lo siguiente en su primera plana: “Disfrutar unos chilaquiles ahora en México sale más caro, pues al incremento en el precio de la tortilla y el gas se suman las alzas al precio del tomate, la cebolla y el chile, lo que ha encarecido los tradicionales chilaquiles”…

Esto, a querer o no, representa severo golpe político al gobierno de López Obrador, porque en sus mañaneras no se cansa de desgañitarse con eso de que “no somos iguales y siempre velamos porque la inflación no le pegue al pueblo de abajo…

Así las cosas, ya es hora de que alguien le diga al inquilino de Palacio Nacional que su gobierno no es como se lo pintan en la comodidad de su despacho, porque el pueblo al que dice querer tanto y tanto está sufriendo carencias en las mesas a la hora de desayunar, comer y cenar…

Está a tiempo, don Andrés…