* Anuncian a sus trabajadores limitación de contrataciones

* Reducción de inversiones, pero todavía sin despidos

* Piden a sus empleados proteger su patrimonio familiar

Los empresarios más poderosos de México no esperaron más y anuncian que no solo han limitado contrataciones de trabajadores, sino que comenzaron a proteger sus inversiones con reducción de gastos, pero aclararon que solo actúan con cautela buscando proteger la marcha de sus empresas y fuentes de trabajo.

Sin mencionar el nombre de Andrés Manuel López Obrador, los empresarios de las factorías más grandes en México, creadoras de más de un millón de empleos, salieron para dar a entender a sus trabajadores los riesgos de perder fuentes laborales y muchas prestaciones si el llamado “peje” gana la Presidencia de la República.

Los inquietos hombres del capital privado no dieron a conocer en detalle los catastróficos escenarios económicos y sociales que se pueden producir si López Obrador detiene el curso del país con todo lo que viene anunciando en su campaña política, pero los trabajadores lo entienden perfectamente y así lo comentan entre sus familiares, pero con una dosis de temor a perder el empleo que ahora ostentan.

La evidencia de miedo al triunfo de AMLO se refleja en las palabras de directivos de empresas como Grupo México, Coca-Cola FEMSA, Grupo Vasconia y Grupo Herdez, quienes enviaron mensajes en video y por escrito en los que advierten sobre posibles consecuencias del triunfo de un gobierno populista.

El mensaje hace alusión al candidato presidencial puntero en las encuestas y sin mencionar tampoco por su nombra a los candidatos que compiten en esta lucha electoral, filtran palabras con las que consideran que tanto Ricardo Anaya, como José Antonio Meade, son garantía de que no se paralizará al país si gana cualquiera de ellos, como suponen que sí ocurrirá con Andrés López.

Es el caso del presidente del Consejo de Administración de Grupo México, Germán Larrea, quien envió una carta a sus 50 mil colaboradores pidiéndoles analizar votar con inteligencia por el próximo presidente y para fundamentar su temor escribió textualmente: "Es imperativo resolver los problemas, nos pronunciamos por un país en donde el Estado de derecho prevalezca como valor fundamental para impartir la justicia por igual. No considero que un modelo populista ni la amnistía sea la solución a ello. Salgamos libremente a votar con inteligencia y no con enojo".

Y para ser más preciso en la inquietud que prevalece entre los empresarios de México, Larrea, uno de los hombres más ricos del país, mencionó a Venezuela como un caso de fracaso del modelo populista.

En apoyo a este empresario salió el presidente de Grupo Vasconia, José Ramón Elizondo, quien expresó a través de un video: "Somos optimistas, pero tenemos la responsabilidad de estar preparados por si desafortunadamente el 1 de julio gana la opción populista con todas sus consecuencias. Contra todos nuestros deseos, hemos limitado contrataciones, inversiones y gastos, pero solo estamos actuando con cautela buscando proteger la marcha en nuestra empresa y fuente de trabajo".

Por la misma vía del video, José Antonio Fernández Carbajal, presidente del Consejo de Administración de FEMSA, dijo: "Dos profundas crisis económicas, la de 1976 y las de 1982, nos afectaron gravemente. Las políticas populistas de los gobiernos de Luis Echeverría y de José López Portillo, que consistían en una mayor participación del Estado en la economía, la regulación de los precios, la política salariar con orientación partidista y el manejo indisciplinado del gasto del gobierno y, por ende, de sus finanzas públicas, generaron un terrible aumento del déficit fiscal y multiplicación de la deuda del país".

Por su parte, el director General de Grupo Herdez, Héctor Hernández Pons Torres, también evocó los gobiernos de los presidentes Luis Echeverría y José López Portillo para advertir que podría haber un deterioro al patrimonio de sus trabajadores en las próximas elecciones.

Y añadió: "Así como me preocupa el bienestar de nuestra querida empresa, también me preocupa el de ustedes y de sus familias. Yo les sugiero que también tomen las medidas que ustedes consideren en su economía personal para amortiguar un posible deterioro a su patrimonio", dijo en una carta enviada a todo su ejército laboral y concluyó con el siguiente mensaje: "Seremos más cautelosos en nuestras inversiones, limitándonos por lo pronto, a la protección y conservación de nuestros activos".