Desde semanas antes de que el líder nacional de Morena Mario Delgado Carrillo quedara como el gran perdedor de las elecciones en la Ciudad de México, ya había señales de que la militancia capitalina le cobraría facturas y se lo cumplió…
Cuestión de recordar lo que difundieron algunos medios de difusión escrita, lo que, a querer o no, el presidente Andrés Manuel López Obrador no quiso ver o de plano no se dio cuenta y nadie de sus asesores se lo advirtió…
Por eso extraña que ahora don Andrés diga que este gran golpe es culpa de las clases sociales medias, de los periódicos, radio y televisión, y hasta del sagrado corazón de Jesús…
Al carajo con todo esto, -como expresó cuando se refirió a la visita de los afectados de la línea dorada-, porque días antes de las elecciones hubo grupos de morenistas que le gritaban a don Mario que el cargo le quedó grande y lo acusaban de estar prostituyendo a Morena…
Todo eso está debidamente documentado en los medios de difusión y aunque el inquilino de Palacio Nacionalo se niegue a reconocerlo y haga lo posible para que no se lo pregunten sus “reporteros” a modo que tienen abiertas las puertas en las mañaneras, el descalabro de Morena en las Ciudad de México y zona conurbada estuvo oportunamente anunciado por sus bases…
¿O alguien lo pueden refutar?