*Corruptelas de empresa que construirá el Tren Maya
*Las exhiben, se enfada AMLO y lanza advertencias
Ya se supo por qué el presidente Andrés Manuel López Obrador mandó investigar todo lo relacionado con los portales de información y análisis que exhibió, con nombre y apellido, el viernes pasado en su mañanera celebrada en Reynosa, Tamaulipas.
Y vaya que estaba enfadado, pues evidenció que pudo haber dado el tradicional manotazo de poder, para ordenar que se rastreara a esos portales digitales hasta por abajo de las piedras, en busca de algo que le permitiera responder y sembrar su ya acostumbrada amenaza de utilizar toda la fuerza del Estado contra quien no comulga con su gobierno y persona, y más si se trata de los medios informativos.
Por fin encontró algo y preparó la embestida. Los acusó de estar patrocinados por poderosas empresas extranjeras, y no solo los exhibió, sino que hizo una serie de alusiones relacionadas con su movimiento político y preparó el momento para lanzar la amenaza, aunque sin mencionarlo directamente, que podrían ser investigados por la temerosa Unidad de Inteligencia Financiera.
Bueno, el caso es que a López Obrador no le gustó que el portal Animal Político haya publicado que China Communications Construction, ganadora de la licitación por más de 15 mil 500 millones de pesos del primer tramo del Tren Maya, uno de los proyectos estrella del actual gobierno de México, acumula acusaciones internacionales de corrupción y pago de sobornos.
Pero menos le gustó que el periodista Raúl Olmos, de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad, haya reforzado esa información al difundir que China Communications Construction tiene múltiples señalamientos de presuntos actos de corrupción y de sobornos en el extranjero.
Lo más duro para el presidente mexicano fue el señalamiento de que en julio de 2011, cuando el Banco Mundial anunció que sancionó a la constructora china, y a todas sus empresas subsidiarias, por prácticas fraudulentas, en obras en Filipinas, por lo que esta compañía no pudo participar en ningún proyecto que estuviera financiado por el Banco Mundial durante siete años, hasta enero de 2017.
Pero no solo eso, pues además, los portales informativos que hicieron enfadar a don Andrés documentaron toda una serie de hechos irregularidades en que incurrió la empresa elegida para construir el Tren Maya, por lo que tuvo que salir huyendo de países como Bangladesh y Canadá.
Así las cosas, vaya que China Communications Construction resultó ser toda una fichita, pero ya fue exhibida como empresa que, como se ve el horizonte, parece estar destinada a figurar como de las consentidas de la 4-T.
Y uuna vez más, ¿no que no son iguales?...
Esto lo señalamos porque estamos por confirmar el tipo de relación que se construyó para que el lopezobradorismo le otorgara la concesión.
Estamos pendientes, pero mientras tanto, que quede para la reflexión.