*Delitos cibernéticos, amenaza la seguridad nacional

Propongo establecer con urgencia en la Ley de Seguridad Nacional que los delitos de ciberseguridad sean tipificados como amenaza a la seguridad nacional, por afectar económicamente con chantajes y extorsiones a los ciudadanos, las empresas y a las instituciones de los tres niveles de gobierno.

Por ello presenté una iniciativa con proyecto de decreto, para adicionar la fracción XIV al artículo 5 de la citada Ley, en materia de amenazas virtuales.

La lista de delitos en el ciberespacio es cada vez más larga. Involucra robo de identidad, secuestro de sitios web, ataque a servidores de empresas, robo de información confidencial de organismos públicos y privados, sustracción de información y contraseñas de clientes bancarios, instalación de virus informáticos, entre otros. Además, los ciberataques afectan ordenadores, celulares y redes informáticas inalámbricas.

Somos ya un país de alto riesgo en este tipo de delitos. De acuerdo con reportes de la consultora KPMG, las empresas son afectadas con 1.2 millones de pesos en pérdidas anuales en promedio, contra quienes los incidentes más comunes son el malware (programas maliciosos) que infectan y dañan sus sistemas informáticos para exigir a sus propietarios pagos por retirarlos.

La empresa Infosecurity asegura que en México los ciberataques cuestan alrededor de 8 mil millones de dólares, aunque aún es complejo medir la pérdida real, porque aún son pocas las empresas que dan a conocer los montos de los chantajes y extorsiones de que son objeto a través de esos delitos.

Con la incorporación de las actualizaciones que hago a través de mi iniciativa, se busca garantizar la integridad y soberanía nacionales para que el Estado esté libre de ese tipo de amenazas.

Considero que es urgente una mayor determinación con mejores instrumentos jurídicos que permitan implementar una gestión de crisis, para prevenir y actuar contra los ciberataques de una manera verdaderamente efectiva.

De esa forma se protegerá a los sistemas informáticos y se mantendrán a salvo las estructuras que se encuentran en el ciberespacio frente a los intentos de alterar, utilizar, corromper, borrar o diseminar la información que ahí se almacena.

Esta situación nos debe motivar para proteger a nuestro país y provocar en cascada todas aquellas acciones que garanticen la seguridad de las personas, las empresas y las instituciones; se requiere un mayor compromiso y estar conscientes de que esta problemática es real y se necesita una actuación sin titubeos.