El presidente Andrés Manuel López Obrador inició su último año de mandato constitucional con repudios al gremio periodístico, como fue la constante durante los cinco años de gobierno, y exigió, tanto a los propietarios de medios informativos, como a los periodistas más famosos, que clarifiquen y den a conocer sus ingresos.
Así lo dijo en su mañanera del miércoles pasado, sin que mediara pregunta al respecto:
“Todos mis adversarios están entregados por entero a la mentira. Bueno, no todos, hay excepciones y sobre todo en los periodistas, mujeres y hombres que se dedican al noble oficio del periodismo; pero los de arriba, no, pues todos…
“Es que es una pirámide, en la punta están los dueños de los medios que en muchos casos son muy ricos, de los más ricos de México. Y luego hay un segundo nivel, que es el de los gerentes o directivos…
“Y luego, el tercer nivel es de los famosos, cada medio tiene un famoso o dos, o sea, un López-Dóriga, un Loret de Mola, un Ciro, un Sarmiento. Esos ganan muchísimo, ojalá nos digan cuánto, por qué no transparentan lo que obtienen…
“Van a decir que es un asunto particular y que no tienen obligación para dar a conocer sus ingresos, pero sus empresas donde trabajan están concesionadas, son empresas de interés público. Además, el oficio de informar requiere de transparencia”…
Eso es lo que manifestó don Andrés desde su escaparate mañanero, pero en los desayunaderos políticos de la Ciudad de la Ciudad de México afloró la pregunta si de veras no sabe cuánto ganan esos empresarios y periodistas…
Que quede para la reflexión…