Por Nicolás Larocca

(dpl news) Generar procesos con foco no recaudatorio y reducir las barreras para el despliegue junto a una batería de acciones regulatorias que favorezcan la inversión y faciliten los planes de los operadores, son las claves para que América Latina aproveche los beneficios de 5G.

En esos puntos coincidieron altos ejecutivos de Brasil, República Dominicana, Chile y Colombia en el marco del diálogo de experiencias internacionales que tuvo lugar en Colombia 5G, evento organizado por DPL Group que se desarrolla hoy en Bogotá.

El diálogo, conducido por la Secretaria Ejecutiva de la Asociación Interamericana de Telecomunicaciones (Asiet), Maryleana Méndez, tuvo como objetivo debatir acciones y encontrar en los casos ya desarrollados, o al menos con despliegues iniciados de la mano de adjudicaciones compatibles con la tecnología, buenas prácticas que puedan ser útiles para el resto, así como respuestas a los desafíos comunes que presentan los distintos países de la América Latina.

En este contexto, la Directora Ejecutiva de la Comisión de Regulación de Comunicaciones (CRC), Paola Bonilla, comentó sobre las acciones del regulador para generar un ambiente propicio para las inversiones en el sector.

El regulador habló de “habilitadores” en el camino a 5G: compartición de infraestructura, medidas a favor del despliegue y menos cargas regulatorias, así como buena relación público/privada para encontrar soluciones en conjunto.

En cuanto a la compartición, la CRC trabaja en proyectos para incluir nuevas verticales para el uso compartido de infraestructura entre el sector de telecomunicaciones y otros, como el transporte y mobiliario urbano, que se suma a las acciones ya en desarrollo con el sector eléctrico.

En tanto, 778 municipios locales, más del 69 por ciento del total, son libres para el despliegue. La ejecutiva también destacó medidas diferenciales para el desarrollo de pequeños prestadores, de hasta 30 mil accesos, con el ojo puesto en que “puedan focalizar sus inversiones en los despliegues”.

Carlos Manuel Baigorri, presidente de la Agencia Nacional de Telecomunicaciones de Brasil (Anatel), habló sobre el punto clave para que la licitación 5G local sea “exitosa”: el enfoque fue no recaudatorio, con un 95 por ciento del valor de espectro convertido en obligaciones. Hoy las 27 capitales de Brasil tienen 5G y en enero se sumarán aquellas con más de 500 mil habitantes, dijo el funcionario, que también destacó la importancia de que “se colocó a disposición del mercado diversidad de espectro, lo que permitió la entrada de nuevos jugadores”.

Julissa Cruz, presidenta del Instituto Dominacano de las Telecomunicaciones (Indotel), hizo un recorrido de lo hecho desde agosto de 2020 en el país caribeño. La gestión actual llegó “con urgencia de medidas” por la pandemia y logró lanzar la licitación en febrero de 2021. “Hubo foco recaudatorio por el contexto económico”, indicó Cruz, y recordó que en octubre de ese año se adjudicó espectro en 3.5 GHz a los operadores Claro y Altice.

La licitación estableció incentivos en el pago, con opción de pago del espectro en cuatro cuotas anuales. A poco más de un año de la adjudicación, “40 por ciento de la población dominicana cuenta con servicios 5G”, indicó la ejecutiva y aportó que el precio fue de 21 mil dólares por MHz por año de concesión.

La propuesta es que el 74 por ciento de los dominicanos cuente con servicios 5G en cuatro años bajo la premisa de que “es el momento de la no regulación, de la simplificación para favorecer los despliegues”.

Para el caso de Chile, que tuvo su subasta múltiple en diciembre, quien expuso fue Rodrigo Ramírez Pino. El presidente de la Cámara Chilena de Infraestructura Digital y extitular de la Subsecretaría de Telecomunicaciones (Subtel) inició su exposición hablando de la buena realidad local: una red 4G con 22 millones de usuarios, un 5G ya en desarrollo y 58 millones de servicios de telecomunicaciones para 19 millones de habitantes.

“Todo el desarrollo del sector se hizo con 400 MHz y en el último concurso se pusieron a disposición 1,800 MHz, también bajo un modelo no recaudatorio”, subrayó Ramirez Pino y agregó que el consumo de datos móviles en Chile pasó de 7 a 17 GB per capita tras la pandemia. El país cuenta con unas mil 500 radiobases por cada millón de habitantes, lo que lo ubica entre los sitios con mejor ratio en la materia.

“Necesitamos reguladores que faciliten. La industria no es enemiga ni sospechosa. Entendemos los desafíos, somos aliados de las estrategias y queremos participar de las agendas”, cerró el ex Subtel el encuentro que tuvo como foco materializar las oportunidades en lo digital.

La región avanza más tarde que el resto y debe aprovechar esa realidad para evitar errores y tomar buenas prácticas para capitalizar los beneficios que promete la quinta generación. La oportunidad es mucho más que una mejor conectividad para gamers, es un cambio de paradigma en clave digital para América Latina.