El antepasado fin de semana la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, reanudó sus giras de trabajo por diversos sectores de las alcaldías y su discurso lo centró en la misma línea de los que suelta todos los días su padrino político Andrés Manuel López Obrador…
Así lo hizo cuando se presentó en la alcaldía Álvaro Obregón, donde reunió a casi 500 simpatizantes que se esforzaron por aclamarla sin lograrlo, pues apenas se escucharon manifestaciones de apoyo y sordos aplausos…
Pero la dama mostró muy poca habilidad política al soltar una expresión que enmudeció a sus simpatizantes. Dijo textualmente: “no permitiré que la corrupción se apodere nuevamente de la alcaldía Álvaro Obregón”…
Craso error que circuló como mecha encendida por casi todo ese territorio de la Ciudad de México, lo que aprovechó la alcaldesa electa panista Lía Limón García, quien de inmediato le respondió vía las “benditas redes”, como las bautizó el presidente Andrés Manuel López Obrador…
“Claro que la corrupción no regresará a Álvaro Obregón, porque el partido Morena perdió por 21% debido a que la gente votó por un cambio ante la corrupción, abandono y falta de servicios. Gobernaré para todos y no habrá borrón y cuenta nueva. La rendición de cuentas empieza ya”…
De esto hay mucho que contar, porque la anterior alcaldesa, Layda Sansores San Román, dejó muchas irregularidades y se las están documentando para exhibir que los morenistas sí son más de lo mismo y llamarla a cuenta…