Muy engallado apareció este martes el presidente Andrés Manuel López Obrador a la mañanera, celebrada en el estado de Tlaxcala, procedente de Veracruz, donde sufrió severos reclamos de pueblo que se considera abandonado por la mal llamada 4-T…
Y tan fue notorio su enojo, que toda la conferencia de prensa se dedicó a tupir con dureza a su cliente favorito de los medios de comunicación escritos, el periódico Reforma… En todas las preguntas que se le plantearon tuvo respuestas direccionadas contra ese medio informativo, aunque los temas no vinieran al caso y en ocasiones arremetió también contra el periódico El Universal… ¿Sería que no durmió bien por los improperios que le enderezó nutrido grupo de veracruzanos que lo esperó en las afueras de los eventos que le organizó su amigo el gobernador morenista de la entidad?... Puede ser, pues en las imágenes que se difundieron en el noticiero del periodista Ciro Gómez Leyva, a quien también atacó en su mañanera referida, se observa al presidente López Obrador a bordo de lujosa camioneta blindada avanzando lentamente, huyendo de las mujeres que textualmente le gritaban: “A la mamá del chapo sí la saludaste de mano”, al tiempo que otras voces gritaban a todo lo que daban: “Que se baje, que se baje, que se baje”… Y con esa tonada fue despedido, sin que el inquilino de Palacio Nacional tuviera el valor de atender las demandas de ese grupo de veracruzanos inconformes… ¿Eso es la mal llamada 4-T?... Que quede para la reflexión…