Dos frases más, recientemente pronunciadas, con que el presidente Andrés Manuel López Obrador pasará a la historia, son las siguientes: “El coronavirus le vino como anillo al dedo a la cuarta transformación”, “Nada de llamar a la unidad para enfrentar la crisis”…
Ambas las soltó durante las mañaneras de la semana pasada y la interpretación de las mismas aterrizan en una interrogante: ¿De veras no quiere terminar su sexenio?... Pues tal parece que no porque muchos de sus seguidores no dan crédito a que haya dicho que la pandemia llegó a México para ayudarlo a sacar adelante su proyecto transformador, a costa de los muertos que ya casi llega a la centena, cifra que aumentará considerablemente, según pronóstico de López-Gatell… Y si a esto se suma que cuando una reportera preguntó a López Obrador que Cuauhtémoc Cárdenas, Clara Jusidman, Santiago Levy, entre otros están planteando que haga un replanteamiento económico y que llame a una especie de acuerdo”, la respuesta fue: “Es una insensatez estar pensando en más de lo mismo. Ya rompimos el molde neoliberal y no se puede poner vino nuevo en botellas viejas. Nada de que el llamado a la unidad”… Así las cosas, juzgue usted grilloso lector, porque esto apenas empieza con la llegada del coronavirus… Que quede para la reflexión…