El diputado federal Porfirio Muñoz Ledo, todavía militante del partido Morena, no se anduvo por las ramas y para que quedara registrado en la historia que reseña el diario de los debates parlamentarios, subió a tribuna para mandar decir al presidente Andrés Manuel López Obrador que está gobernando a México como un ranchero…

Claro que el legislador no mandó este mensaje así de claro, pero es cuestión de analizar cada palabra de lo que expresó la madrugada del viernes pasado, en referencia al empeño del inquilino de Palacio Nacional para violar la Constitución con un artículo transitorio que abre la puerta al titular de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, para que prolongue su permanencia en el cargo…

Analice usted, grilloso lector, esta frase de don Porfirio: “México no es un rancho, ni Macuspana, ni Batopilas. México es una gran nación. La democracia tiene que defenderse todos los días”…

¿Alguien duda que estas palabras no están construidas a la medida del actual presidente de México, quien nació en Macuspana, Tabasco?...

Pero Muñoz Ledo soltó otra frase más hecha a la medida internacional de López Obrador, porque así está considerado en varios países del mundo, desde donde también se lo han mandado decir a través de los periódicos…

“Ser machista, ser autoritario, ser centralista, ser discriminatorio y ser chicharronista. Este es el país de solo mis chicharrones truenan”…

¿Todavía alguien duda de estas palabras son certeras a la imagen que se ha estado sembrando el propio López Obrador?...

Y si alguien no lo ve así, por lo menos que quede para la reflexión…

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