Infructuoso, muy infructuoso fue para la señora Margarita Zavala de Calderón meterse en esa aventura de pretender convertirse en la primera mujer presidenta de México…
Hasta donde comienza a trascender, inicialmente ella no mostró interés de postularse a ese cargo, porque lo que vivió como primera dama al lado de su esposo Felipe Calderón Hinojosa, le permitió reflexionar muchas cosas que pronto intentará plasmar en un libro… Pero paulatinamente su marido el expresidente la fue mareando hasta que la convenció y ahí está el frustrante resultado… Desde un principio de iniciada la campaña electoral doña Margarita se dio cuenta de que no había condiciones para participar, pero el empeño de su esposo fue determinante para seguir buscando el rumbo del voto… Y efectivamente, no pasó mucho tiempo para que se convenciera de que desde siempre fue una intentona fallida, comenzando por la percepción que sembró entre toda esa grey que conforma el tradicional Partido Acción Nacional, en el sentido de que pudo más su ambición anidada en un reducido seno familiar, que el interés común del organismo político, a grado tal que abandonó el partido por abrazar esa loca aventura que, a la postre, solo la exhibió públicamente y de paso perdió mucho dinero por una muy mala estrategia de lucha electoral… Y esto último, precisamente, la está obligando a abandonar la campaña, porque corre el riesgo de caer en lamentable situación económica y ahora busca alguna negociación para intentar resarcir algo de lo invertido… Así las cosas, téngase por seguro que la señora Zavala sabrá salir airosa para no verse envuelta en un resultado vergonzoso… Recuérdese que la política no es de casualidades, sino de estrategias y quien mejor las construye, mejores resultados alcanza… Que quede para la reflexión…