El presidente Andrés Manuel López Obrador no se cansa de repetir que tener un avión como el que está rifando es un insulto para el pueblo y tiene razón…
Y tampoco se cansa de decir que en México se acabará la corrupción, porque llegó al gobierno para limpiar la administración de funcionarios que se dan lujos a costa del erario… Además, sembró la frase “me canso ganso” para convencer a sus seguidores de que está barriendo las escaleras de la administración pública federal de arriba para abajo… Tampoco se cansa de insistir en sus mañaneras que en la 4-T se acabó el gobierno rico con pueblo pobre… Bueno, pues esto viene cuento, porque el periódico El Universal publicó lo siguiente el viernes pasado en su primera plana: “La Secretaría de Educación Pública solicitó a Hacienda un millón 411 mil pesos para renovarla oficina de su titular, Esteban Moctezuma, a fin de garantizar y facilitar el cumplimiento de sus responsabilidades… La SEP requiere bienes muebles como 10 escritorios ejecutivos de caoba, con un costo de 133 mil 580 pesos; 10 sillas ejecutivas de piel negra que valen 50 mil; 10 sillas ejecutivas de pliana, de 46 mil 610, y una sala completa en piel negra de 51 mil 500 pesos”… Hasta ahí lo que la SEP pide para la oficina de Esteban Moctezuma, pero hay más exigencias de dinero para adquirir más muebles, incluido un asador de carne y un horno para pan… Con esto ¿alguien puede dudar que son iguales?... Pero lo más cruel es que no solo demuestran que son ostentosos, sino que lo hacen sin el más mínimo escrúpulo frente a la pobreza a la que está llevando la pandemia a miles de familias… De esto hay mucho que contar…