Muy lamentable esa frase que está acuñando el presidente electo Andrés Manuel López Obrador, en el sentido de que su gobierno perdonará, pero no olvidará a los delincuentes que causan tanto daño a las víctimas…
Téngase por seguro que esto más pronto que tarde se le revertirá, porque la frase ya recorre todos los rincones del país y sin broma comienza a circular la versión de que en los primeros meses de la era lópez-obradorista saldrá de la cárcel un auténtico ejército de presos y presas que tienen años sin recibir sentencia… A ojos de cada vez más especialistas, el asunto no se ha dimensionado en su auténtico valor social, porque no se clarifica cómo se seleccionará a quienes serán beneficiados con la cacareada amnistía que ya se arma en el equipo del nuevo mandatario mexicano… Por lo pronto, nuestros sabuesos informativos captan señales de que en ese mismo círculo del próximo gobierno se comienzan a recibir comentarios de lo que ocurre entre los familiares del caso Ayotzinapa… La cosa se pondrá difícil… Y si no, al tiempo…