En el Senado de la República hay 590 trabajadores sindicalizados, con antigüedades que datan de hace 40 años, pero hay otros 400 empleados en servicio civil de carrera y servicio técnico y tres mil 200 más que cobran por honorarios…
Los primeros rigen su relación laboral de acuerdo con las conquistas sindicales que han logrado a través de décadas de estar al servicio del órgano parlamentario… Pero los de civil de carrera, que comenzaron a ser contratados en 1994, cuando el priísta Fernando Ortiz Arana presidió la 56 Legislatura, nunca fueron reconocidos por el gobierno federal y desde entonces nadie se preocupó por regularizar esa posición laboral, según se quejan algunos de ellos… Los más agraciados han sido los que cobran por honorarios, pues desde septiembre del 2012, cuando comenzó el periodo de la 62 y 63 legislaturas que concluye el último día de agosto próximo, cuando lleguen los senadores que sean electos el primero de julio de este 2018, y que integrarán la 64 Legislatura, serán liquidados con cantidades estratosféricas, lo que sumado al jugoso salario que les fue asignado durante los seis años de “trabajo parlamentario”, representa una auténtica minita de oro para selecto grupo de empleados elegidos en su momento por cada uno de los 128 senadores… ¡Ah!... Pero derivado de todo este escenario de relaciones laborales, se viene un tremendo conflicto, pues mientras los trabajadores sindicalizados reciben una cantidad mínima de bono económico por terminación de legislatura, los de civil de carrera y servicio técnico están amenazados de no ser reconocida su antigüedad, lo que además está generando inconformidades de escándalo… De un momento a otro se espera que se haga público o se filtre una lista de supuestos trabajadores de honorarios que nadie conoce en el recinto parlamentario y que desde hace años han sido señalados como auténticos “aviadores”, como se les conoce en México a quienes reciben salario sin devengarlo… Es, pues, un asunto que pronto estallará y que tocará enfrentar a los próximos senadores, quienes deberán responder a las múltiples demandas laborales que serán presentadas ante la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje… Conflicto explosivo… ¿O no?...