Por Violeta Contreras García

(DPL News) Ante la digitalización de las economías y las sociedades, los cambios en los patrones de consumo y la aparición de nuevas tecnologías, “la fibra óptica es una tecnología a prueba del futuro”, que no sólo contribuye a responder a la realidad actual, sino que será clave para la conformación del ecosistema digital de los próximos años y más allá.

Marcos Guido, gerente de Mercado para Operadores de Furukawa, en entrevista con DPL News, explicó que la fibra óptica es fundamental porque va a permitir soportar tecnologías actuales y futuras, como algunas que ya se están desarrollando: las redes 5G y el Internet de las cosas (IoT), por ejemplo.

La fibra óptica “está interconectando las diferentes tecnologías”. No sólo es parte de las redes de telecomunicaciones, también puede integrar toda la red interna de una empresa; ofrece ventajas como mayor ancho de banda para transportar paquetes de datos; no recibe interferencias electromagnéticas y es más segura respecto de otras tecnologías, destacó.

En el horizonte del despliegue para 5G, la fibra será una autopista para su desarrollo.

Guido señaló que las redes de quinta generación van a requerir mucha más fibra para establecer conexiones en celdas pequeñas para atender áreas geográficas específicas, con mayor cobertura, capacidad y calidad del servicio.

En América Latina, países como Uruguay, Chile y México tienen la mayor penetración de fibra. Sin embargo, la capilaridad de la fibra aún no es suficiente y falta extender el tendido de infraestructura.

Tanto en la región como en varias partes del mundo, “existe un viaje bastante grande de construcción de fibra, pero la gran mayoría de los operadores están apuntando a ese camino”, puntualizó.

Incluso organismos como la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) han advertido que uno de los desafíos para construir 5G es incentivar las inversiones en fibra.

Por ello, la UIT ha recomendado en múltiples ocasiones que los gobiernos consideren eliminar las cargas fiscales y tomen medidas de política pública acerca de la fibra para facilitar el desarrollo de la nueva tecnología.

En especial, el experto enfatizó que en la implementación de 5G “una de las cosas más importantes es tener un backbone robusto”.

En el caso de Furukawa, comentó que ya cuenta y está desarrollando cables con dimensiones reducidas, pero con mayor cantidad de fibra en el interior, a fin de responder a las necesidades de 5G y la fibra hasta el hogar.

Durante la pandemia, los operadores de telecomunicaciones que, previamente, habían apostado por la fibra tuvieron menos inconvenientes en sus redes para responder de manera adecuada a los cambios en los patrones de consumo, dijo por su parte Marcos Guido.

A lo largo de 2020, la población mundial se internó en un confinamiento obligado para mitigar los contagios de Covid-19. Esto provocó un aumento en el uso de Internet, del tiempo en línea, de aplicaciones de teletrabajo y herramientas para la educación a distancia, entre otras actividades.

Guido indicó que algunos sistemas de comunicaciones se quedaron sobrecargados o incluso algunos superaron su capacidad. Los que tuvieron ventaja fueron aquellos operadores cuya base es la fibra óptica, para brindar conexiones con el ancho de banda que exige la conectividad actual.

Incluso, algunos proveedores de servicios supieron aprovechar la ventaja de la fibra para hacer crecer su base de clientes de banda ancha fija y, con ello, aumentar los ingresos que perciben por ese negocio.

Con una visión a 2021, los operadores están planeando cuál será el rumbo de su Capex (inversión en infraestructura) el próximo ciclo y a qué ámbitos darán prioridad.

El gerente de Mercado para Operadores de Furukawa resaltó que se visualizan muchas inversiones en desarrollo tecnológico, pero también un panorama en el cual “los operadores están derivando el Capex a otros actores”.

En el futuro de la inversión en tecnologías como la fibra óptica, Guido proyecta que no participarán los proveedores de servicios en solitario, sino que cada vez se pone más de manifiesto que es más factible y rentable construir las redes con la participación de diferentes compañías, dedicadas especialmente en algún segmento del mercado, como la infraestructura.