*No aumenta poder adquisitivo de los más necesitados
El Banco de México desde hace muchos años, desde 1994, ha sido quien regula tazas de interés, quien regula la emisión de billetes para que se controle la inflación.
Se acordarán que antes del 94 había unas inflaciones muy altas que inclusive tuvimos que reducirle 3 ceros al peso para que la moneda fuera más manejable para la población.
Bueno, a partir del 94 que entró esa regulación del Banco de México, que se le dio esta autonomía, la verdad es que la inflación se ha logrado controlar.
Lo que no hemos podido conseguir a través del Banco de México es que el poder adquisitivo aumente.
Realmente se ha controlado la inflación a costa de los salarios, a costa del Banco de México, y serán cosas que tendremos que ir regulando también desde el Senado de la República.
Por eso esta propuesta que vamos a hacer para que el Banco de México además del control del poder adquisitivo, del control inflacionario, el Banco de México tenga que ver con la promoción del crecimiento económico del país y el empleo.
Que el Banco de México tenga esta autonomía para regir las diferentes variables de policía económica, monetaria y fiscal, y que nos lleve a que haya más crecimiento. Pero con una condicionante.
Tiene que rendirle cuentas al Senado de la República el Banco de México, y obviamente que el Banco de México para poder fijar sus metas tiene que ponerse de acuerdo con el gobierno para que podamos llevar a México a los niveles que deseamos.
La inversión extranjera, siempre dicen que es la mejor, pero no es suficiente; la inversión nacional tampoco nos está dando lo suficiente para que pueda crecer el país. El financiamiento se está privilegiando hacia el consumo de manera muy cara, por cierto, y sin embargo hay mucho recurso que podríamos estar destinando a actividades productivas y que esto fomente el crecimiento económico de nuestro país y no lo está haciendo la banca.
Así que se necesita una regulación más integral y de esto vamos a tratar hoy con esta iniciativa, modificar el Artículo 28 de la Constitución.