El tremendo desplome electoral que sufrieron priístas, perredistas, panistas y verde-ecologistas arrastrará a por lo menos mil 500 trabajadores que desde hace años trabajan en esos organismos políticos…
Esto, a querer o no, arrastrará a sus respectivas familias, pues es sabido que el trabajo partidista en la mayoría de los casos requería de casi todo el tiempo disponible de los empleados, para el desarrollo de las tareas políticas encomendadas… En muchas ocasiones grupos de trabajadores se tenían que desplazar a diversos estados del país, lo que permitía un ingreso extra que les ayudaba, en mucho, a satisfacer necesidades de manutención familiar… El despido de trabajadores ya comenzó en el PRI, donde se sabe que serán casi 700 los que pasarán a las filas del desempleo y se les sumarán otros 500 que en breve serán cesados en el PRD y 300 más que laboraban en el PAN y el PVEM… Escenario contrario se vive en el partido MoReNa, propiedad de Andrés Manuel López Obrador, donde se dice que sí habrá necesidad de ampliar su base laboral por el trabajo que les espera para mantenerse en el poder que buscan prolongar por lo menos dos sexenios… Ojalá que los desempleados políticos de abajo tengan abrigo en las bases proselitistas de los nuevos dueños del país, pues independiente de fobias ideológicas, el pueblo requiere de fuentes laborales… ¿O no?... Que quede para la reflexión…