Cosa curiosa de las afirmaciones o mensajes que se envían desde el poder político, económico o social que evidencian, una vez más, que en México ni hay transformación, ni ganas de unificar a la nación para evitar el retroceso al que se dirige…

Para muestra un botón actualizado de este escenario. Durante la mañanera del lunes pasado, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró, con marcada seguridad, que México ya es una potencia mundial económica…

Lo dijo así en respuesta a una pregunta a modo: “México es ya una potencia económica, sobre todo porque se procura la distribución del ingreso. ¿De qué sirve tener mucho dinero en pocas manos?”…

Bueno, pues unas horas después, del mismo lunes, el presidente de la Coparmex, José Medina Mora, fue entrevistado por periodistas de Televisión Azteca, a quienes dijo que en el sector económico de México hay marcada preocupación por el aumento de la pobreza y pobreza extrema que se está sembrando en este país…

Y dio datos fundamentados con información del propio gobierno de la mal llamada cuarta transformación, que demuestran haber contabilizado en estadísticas profundamente confiables, que México ha aumentado casi siete millones de pobres y cuatro millones de pobres en extremo…

A quien creerle, al gobernante que dice que ya somos potencia mundial o a los empresarios que están preocupados porque cada vez hay menos habitantes que les compren sus productos y servicios.

Que quede para la reflexión…

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