El presidente Andrés Manuel López Obrador ha dicho hasta el cansancio que su gobierno no es tapadera de nadie y que su pecho no es bodega, además de que la cosa pública debe ser cada vez más pública…
Bueno, pues esto viene a cuento, porque también se ha dedicado a lanzar acusaciones a diestra y siniestra, pero sin presentar las denuncias a que está obligado por ser el guardián de los dineros del pueblo, pero sobro todo para cumplir su cacareada lucha contra la corrupción, en que se basa la supuesta transformación que abandera…
Para no ir muy lejos, mencionamos solo lo que dijo el miércoles pasado en su mañanera: “Hay gobiernos estatales que destinaban hasta 500 millones de pesos a publicidad, pues cómo no va a haber déficit, 500 millones en publicidad, es mucho”…
Ese mismo día también acusó públicamente que hay pensiones de trabajadores de 150 mil pesos al mes y molesto se preguntó: “¿Cómo es eso? Ya parecen a los del Banco de México, que van ahí a trabajar y salen con unas pensiones elevadísimas”…
Pero días antes, don Andrés también en su mañanera denunció que había periodistas que ganaban 500 mil pesos mensuales, pero en ninguno de todos estos casos reveló nombres y mucho menos si se pagaron los impuestos correspondientes o los anteriores presidentes de la República se los condonaron…
Así las cosas, es mucho lo que don Andrés sí se guarda en la bodega de su pecho y sí es tapadera de algunos personajes que pone en entredicho en casi toda sus mañaneras…
Vaya incongruencia…
¿O no?...