En solo tres días se vivieron en México tres episodios que demuestran, una vez más, que la mal llamada 4-T que tanto se desgañita en promocionar el presidente Andrés Manuel López Obrador, sí es más de lo mismo…
Cuestión de reflexionar lo que circula en las “benditas redes”, así bautizadas por el inquilino de Palacio Nacional, donde se aprecia, con toda claridad, la forma en que policías uniformados y elementos del Instituto Nacional de Migración, tunden con brutal violencia a un migrante en el sur del país…
Y dos días después, el lunes por la mañana, las mismas “benditas redes” exhiben el rostro levemente ensangrentado de la alcaldesa electa de Álvaro Obregón, Lía Limón, quien fue agredida por un policía de la Ciudad de México, quien le propinó severo golpe con el escudo con que pretendía cumplir la orden de evitar que pasara a las instalaciones del congreso capitalino…
Si antes los gobiernos locales y federales tenían granaderos y policías que las huestes izquierdistas llamaban gorilas, ahora a esos mismos guardianes estatales cómo se les debe llamar…
Así las cosas, quién en su sano juicio puede negar que todo es igual por inercia lógica…
¿O ya enloquecieron?...