Como consecuencia de la lucha por el reconocimiento y el respeto a la diversidad, la estructura de la familia ha cambiado: hoy se observan familias homoparentales, lesbomaternales y transgénero, afirmó Andrea Kenya Sánchez Zepeda, académica de la Escuela Nacional de Trabajo Social (ENTS), en ocasión del Día Internacional de la Familia, que se conmemora este 15 de mayo.
Se trata, dijo, de una institución fundamental; es una estructura de organización de primer nivel que no está en crisis en sí misma, sino por las condiciones que vulneran a este grupo y lo colocan en riesgo social y de fragmentación.
La familia sigue siendo la unidad básica de la sociedad y aunque existe la idea de que la ruptura del tejido social se da a partir de los problemas que se registran en la familia, es erróneo responsabilizarla.
La académica precisó que existe un sistema social, político y económico en crisis, generado a partir de la mercantilización, valores, relaciones sociales, simbolismos, idearios y deseos. Entonces, “ciertas producciones simbólicas se relacionan con la ruptura del tejido comunitario y el familiar”.
La familia, un refugio
La universitaria resaltó que este grupo representa el nivel más básico de organización social; es una primera esfera que permite a los humanos entender los procesos de socialización y brinda (o debe hacerlo) seguridad, conexión y refugio.
El objetivo de esta efeméride es crear conciencia sobre el papel fundamental de esa institución en la educación de los hijos desde la primera infancia, y las oportunidades de aprendizaje permanente que ofrece a niños y jóvenes. Este año destaca el papel de las familias en las acciones ante el cambio climático.
Aunque su concepto se ha transformado en las últimas décadas, de acuerdo con las tendencias mundiales y cambios demográficos, las Naciones Unidas consideran que ella constituye la unidad básica de la sociedad.
Las familias en cifras
Datos de la Encuesta Nacional de los Hogares (ENH) 2017, del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), muestran que en México hay 34.1 millones de hogares. Los resultados también arrojaron que 28.5 por ciento de los hogares son encabezados por mujeres.
Kenya Sánchez refirió las principales razones por las que ellas quedan al frente de una familia: por abandono del cónyuge, contextos de violencia de género o económica, por migración, incluso por desaparición forzada de la pareja.
En cuanto a su estructura, los principales cambios que se han dado tienen que ver con la lucha por el reconocimiento y respeto a la diversidad; así, hoy se observan familias homoparentales, lesbomaternales y transgénero, subrayó.
En México, 198 mil familias son encabezadas por parejas del mismo sexo; de éstas, poco más del 50 por ciento tiene hijos, según la Encuesta Intercensal del INEGI.
Finalmente, subrayó Kenya Sánchez, “las personas cambian y los vínculos son diversos, pero la institución social de la familia permanece”.