*Esta reforma judicial es un engaño que no mejora la justicia
La reforma judicial es un engaño que no busca mejorar el sistema de justicia, sino que pone en riesgo la independencia de este Poder del Estado y afecta principalmente a los sectores más vulnerables.
El dictamen no contempla mayor presupuesto, más juzgados, ni un fortalecimiento de las defensorías de oficio y fiscalías, lo que implica que la impartición de justicia continuará siendo deficiente.
Destruye nuestra democracia y la independencia entre Poderes, por lo que votamos en contra de la propuesta para defender a México.
Además, hubo irregularidades en el proceso de aprobación de la reforma y tenemos que alertar sobre las consecuencias económicas, como la posible reducción de inversiones y empleo; además, podría llevar al país a una crisis similar a la vivida bajo la dictadura de Santa Anna en 1843.
Por ello se justifican las movilizaciones de los estudiantes de Derecho para defender su profesión, argumentando que la reforma afecta gravemente a la justicia y a los derechos humanos en México.
Sólo beneficiará a los más ricos, mientras que los pobres y las minorías quedarán indefensos ante un sistema judicial controlado por el gobierno.