*Desterrar del país las trampas electorales
Todos ayudemos para establecer en definitiva un verdadero sistema político democrático, que la democracia se arraigue, se convierta en costumbre, en hábito, que todos cuidemos la democracia y que no regresemos a las etapas de predominio del fraude, de la compra del voto, del relleno de las urnas, de la falsificación de las actas.
Que eso quede atrás, que ya nunca más vuelva al país, esa va a ser una gran contribución de nuestra generación, eso es parte esencial de la transformación de México.
Y desde luego el mejor sistema político es la democracia, desde los griegos quedó eso se manifiesto.
Cuando se hacen los análisis de todos los sistemas políticos, cuando se analiza qué es la monarquía, qué es una oligarquía, qué es la democracia, se llega a la conclusión que es el mejor sistema político. Algunos más críticos, escépticos, hablan de que es el menos malo de los sistemas políticos.
Pero sin duda mucho de los problemas de México, sobre todo el principal problema, la corrupción, se pudo afianzar en el gobierno, pudo echar raíces en el gobierno, por la falta de democracia.
Cuando hay democracia nadie puede sentirse absoluto en ningún nivel de la escala. La democracia es equilibrios, es competencia, la democracia obliga al que está en el gobierno a hacer bien la cosas porque, si no, en la elección futura sale ese partido y entra otro. Es competencia y eso es bueno.
06/11/2020