Vengan a la frontera mexicana a comprar gasolina, porque está más barata que en su país, mandó decir el presidente Andrés Manuel López Obrador a los consumidores gringos y lo hizo desde el salón Oval de la Casa Blanca, en Washington…
Y ahí mismo, el mandatario mexicano le dijo al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, que no se preocupara, que México le va a comprar a los productores de su país, 20 mil toneladas de leche en polvo…
Estos dos asuntos parecieran no tener la mayor importancia para don Andrés, pero lo cierto es que fue lo que más dolió entre cada vez más pueblo sabio y mucha pieza que ya no se traga las cosas que se dicen en las mañaneras…
Cuestión de leer lo que se están publicando en los medios informativos a lo largo de la frontera de México con Estados Unidos, donde las críticas a López Obrador le están lloviendo por incitar a los vecinos del norte a consumir la gasolina subsidiada con dinero de los mexicanos y se preguntan por qué no mejor se vende el combustible al precio real a los vehículos con placa de aquel país…
Y en el caso de la leche en polvo, los productores mexicanos le están mandando decir al inquilino de Palacio Nacional que es un traidor, porque en marzo de 2019, en el municipio de Encarnación de Díaz, Jalisco, se comprometió a no comprar la leche en el extranjero para apoyar las cuencas lecheras de los Altos de Jalisco…
Así las cosas, ¿alguien dudad de lo que realmente siente el pueblo mexicano por el presidente de la mal llamada 4-T?...
Que quede para la reflexión…