Una de las aeromozas mexicanas que falleció en el avión que cayó en Cuba hace algunos días, cumplía su trabajo con el miedo reflejado en la forma en que se despedía de su hija cada vez que salía a volar en esa fatídica aerolínea…
Esto se comenta con dolor profundo en la escuela Fundación Azteca, a donde la hija de la valiente mujer trabajadora del aire asistía a cursar la secundaria… “Mi mamá se despide de mí con mucha fuerza cada que sale a trabajar en el avión”… Palabras textuales que decía la estudiante cuando la aeromoza se despedía al dejarla en la escuela… Y la tragedia ocurrió, lo intuía la tripulación y ahora el secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, carga con la muerte de estas trabajadoras y trabajadores, además de una centena de pasajeros cubanos, pues de todos era conocido el defectuoso sistema del avión, menos del funcionario… Que quede en su conciencia…