Por Mirella Cordeiro y Alejandro González
Claro Brasil, filial de América Móvil, puso en órbita un nuevo satélite, el Star One D2, operado por Embratel. El equipo que fue lanzado este viernes 30 de julio aumentará la cobertura de banda ancha en Centro y Sudamérica, además de servir como backhaul de red móvil en Brasil, brindar TV de paga e Internet para clientes corporativos y gubernamentales.
El Star One D2 está equipado con bandas C, Ku, Ka y X, que le permitirán expandir la cobertura de banda ancha y agregar una carga útil de banda X mejorada para uso gubernamental en la región atlántica.
“Este es el satélite más grande que jamás hayamos construido y, con él, reforzaremos aún más nuestro liderazgo en el mercado, proporcionando más recursos para las telecomunicaciones en Brasil y en toda América Latina”, dijo José Formoso, director General de Embratel, en una red social.
“Fueron 40 meses de arduo trabajo por parte de un equipo altamente especializado, con muchos ingenieros y astrónomos. También contamos con el apoyo de socios internacionales para la construcción y lanzamiento del satélite con el mejor cohete”, agregó.
El Star One D2, con un peso de 6,190 kg y una esperanza de vida de 15 años, es el tercer satélite fabricado por Maxar para Embratel. Antes de este, la compañía construyó el Star One C4, lanzado en julio de 2015, y el Star One D1, enviado al espacio en diciembre de 2016.
De acuerdo con Carlos Slim Domit, presidente del grupo América Móvil (AMX), propietario de Claro Brasil, el nuevo equipo es el sexto activo de la constelación de AMX.
Lanzamiento
El satélite fue lanzado por Ariane 5 de Arianespace, un cohete de 50.5 metros de altura, desde una base en la Guayana Francesa. El vehículo también llevó el satélite Eutelsat Quantum, de Eutelsat, a la órbita terrestre.
Aproximadamente 25 minutos después del lanzamiento, el cohete entró en la órbita terrestre. La primera separación ocurrió a los 29 minutos, dejando al Star One D2; y la segunda, a los 36 minutos, finalizando la misión.