*8 de marzo, día internacional de la mujer
El 8 de marzo es un día para reflexionar sobre los avances logrados en materia de disminución de las brechas de desigualdad entre mujeres y hombres y de violencia de género. Esta reflexión nos lleva, indudablemente, a pensar en qué situación se encuentra nuestro país actualmente respecto a este tema.
Si bien es cierto que cada día seguimos avanzando hacia la igualdad sustantiva, todavía existe un largo camino por recorrer. Diariamente, la realidad de las mujeres es abrumadora, pues muchas de ellas enfrentan la violencia sistemática en sus distintos tipos y modalidades.
Por lo tanto, es momento de seguir exigiendo más cambios para eliminar todas las desigualdades y violencias ejercidas contra nosotras. Hoy más que nunca, necesitamos determinación para lograr avances sin precedentes e iniciar la eliminación de la cultura machista y patriarcal que tanto daño nos ha hecho, que nos violenta, daña, rechaza, menosprecia y, en el peor de los casos, nos mata.
A pesar de esta terrible realidad, hoy también estamos en un contexto de hartazgo y cansancio ante la impunidad y la falta de respuesta por parte de las autoridades que, además, son poco empáticas con la causa de la lucha de las mujeres.
La visibilidad que han tenido los feminicidios y otras formas de violencia han provocado que las mujeres salgan a las calles y se organicen en busca de demandar la protección de sus derechos, de sus vidas, pero también para elaborar estrategias de acción que les permitan sentirse seguras en este ambiente machista, misógino y patriarcal.
El silencio se está rompiendo, para muestra, las mujeres organizadas de las distintas facultades de la UNAM, que mantienen el paro en busca de soluciones y sanciones efectivas contra los profesores y compañeros que las han agredido durante años.
El domingo 8 de marzo, las mujeres saldremos de nuevo a las calles a marchar para exigir la protección de nuestros derechos, de nuestra seguridad, de nuestras vidas.
Es un día para hacernos visibles, para no seguir en silencio y generar una revolución no sólo política, sino económica, social y cultural que nos permita disfrutar de nuestra vida de manera plena, sin violencia y en condiciones de igualdad.
El aumento de la violencia de género se ha vuelto insostenible en México, por lo que este 9 de marzo, se realizará un paro nacional de mujeres para protestar por esta situación.
Es un día para hacernos visibles parando, pues simularemos una desaparición para que se mida la magnitud de nuestra falta en la sociedad que nos agrede e ignora. 10 mujeres desaparecen al día, de verdad, en México; este ejercicio es también por ellas y para generar empatía con todas aquellas que han perdido a sus amigas, hermanas, madres e hijas.
Hagamos del 2020, un año decisivo para las mujeres y niñas de todo el mundo. Es momento de reescribir nuestras historias desde el inicio, para mantenernos a salvo, para mantenernos vivas.
Este día no es para “festejar” sino para conmemorar la lucha constante de todas las mujeres que nos ayudaron a obtener los derechos que los hombres nos restringieron por muchos años.
Es momento de que nosotras nos sumemos a la lucha, para que podamos vestir como deseemos, para ejercer nuestra sexualidad con libertad, para caminar tranquilas por las calles sin importar el lugar o la hora, para poder decidir sobre nuestros cuerpos, para vivir.
#El9NadieSeMueve #ElParoEsDeNosotras