*El país requiere de cambios financieros urgentes

Trabajamos en la propuesta de modificar la Ley de Disciplina Financiera, con el fin de eliminar topes administrativos y de control presupuestal para que las entidades puedan contratar más personal médico.

La 4T plantea ser corresponsable con la población de los estados, ya que las entidades tenían focos rojos para garantizar recursos y atender la emergencia.

Por ejemplo, era absurdo mantener el tope para el crecimiento de la nómina, que en principio es una buena idea, cuando en la emergencia hay necesidad de contratar médicos, enfermeros y técnicos.

También es importante que las aportaciones no ejercidas del 2019, en vez de ser devueltas, puedan comprometerse y devengarse hasta septiembre de este año.

Se requieren mejores condiciones de control y registro de las finanzas locales, pero hay que complementar esta iniciativa con otras adecuaciones.

Por ejemplo, la contraparte estatal de FONDEN debe ser revisada, porque aun cuando se amplíe su destino y se pueda usar para la contingencia, si no se elimina la obligación de las entidades para presentar el 50% de este recurso, en realidad el problema no se resuelve, porque los estados no tienen como hacer esa aportación y el dinero finalmente no llega.

También hay que pensar en estrategias para promover la formalización de los empleos. Mientras en el país no existan los registros adecuados, es muy complicado dar apoyos a la población que está perdiendo su trabajo. Para dar apoyos a los desempleados, en esta o cualquier otra contingencia, es indispensable que haya un registro que lo haga viable.

Deben revisarse el registro de adeudos de ejercicios anteriores para permitir un uso más adecuado.

No tengo duda de que esta propuesta es de gran relevancia y merece ser discutida cuanto antes en la Comisión de Hacienda, para que la impulsemos y perfeccionemos con auténtico ánimo federalista.

Para que el país salga adelante todos los actores políticos debemos entender que no basta con apoyar, como se debe, a las autoridades sanitarias federales, sino que también hay que ayudar a que los servicios de salud estatal puedan operar; y de igual manera, así como inevitablemente se requerirá repensar las finanzas nacionales y sus balances, también hay que hacerlo con las finanzas estatales, determinó.

Son tiempos de acuerdo entre el Gobierno Federal y las entidades federativas.

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