*Regular redes sociales para fortalecer la libertad de expresión
Regular el uso de las plataformas digitales, redes sociales y la creación de contenido, permitirá fortalecer el la libertad de expresión y salvaguardar los derechos humanos de terceros.
Por ello organizamos la segunda jornada del Parlamento Abierto “El impacto de las plataformas digitales en la sociedad mexicana”, ejercicio que busca recuperar las visiones, experiencias y propuestas que permitan promover las reformas que fortalezcan el derecho a la libertad de expresión, así como el respeto a los derechos de terceros.
El objetivo es examinar y reflexionar sobre el impacto de las nuevas tecnologías en las dinámicas sociales, con énfasis en la interacción de la población con las plataformas digitales, la aparición de los “influencers” y las implicaciones éticas y jurídicas de estas transformaciones.
Una de las principales problemáticas de las redes sociales y plataformas digitales, es que la libertad de expresión se autodestruye cuando lleva un mensaje de odio a sí mismo.
Actualmente el 74 por ciento de las niñas, niños y adolescentes tiene acceso y registro en las redes sociales y en los últimos cinco años se ha registrado un crecimiento de consumo en las plataformas digitales de entre el 400 y 500 por ciento.
Esto representa un reto ya que se reconocen como fuente de influencia entre niñas, niños y adolescentes, quienes aspiran a ser “youtubers” por los beneficios económicos que algunos creadores de contenido refieren. Además, hay una alta incidencia en las redes sociales en la orientación en el consumo sin mecanismos de supervisión por parte de la autoridad.
Otros de los desafíos es que actualmente la regulación se limita a medios tradicionales y no hay atribuciones para regular las plataformas digitales, las redes sociales ni los contenidos.
Por ello insistimos en la importancia de escuchar a las audiencias, analizar mecanismos de regulación desde el contexto nacional actual y revisar el comportamiento de la sociedad mexicana.
Debemos analizar mecanismos de regulación y de autorregulación, planteándonos, por supuesto las preguntas de qué queremos proteger, la protección de las infancias, el establecimiento de mecanismos de clasificación, trasladar la regulación de medios tradicionales a los medios digitales, garantizar el uso ético de las redes sociales.
Rechazo que con se pretenda tener diseñar una “ley mordaza”, para limitar la libertad de expresión como algunos creadores de contenido e “influencers” lo han interpretado o manifestado.
Lo negamos categóricamente y hago mucho énfasis en que esta regulación es para aportar favorecer y dar marco regulatorio que ayude a los generadores de contenidos a que lo hagan con responsabilidad, con ética, con compromiso hacia la sociedad y con un compromiso real de lo que son y garanticen el respeto a las audiencias y a las nuevas audiencias que son nuestros niños, niñas y adolescentes. Así que es justamente para fortalecer esa libertad de expresión que está implícita en nuestro artículo sexto de la Constitución.