*Así me intentó reclamar un ciudadano en el avión
El primero de enero de este año venía yo en el avión de regreso a la Ciudad de México y un señor se paró con su teléfono y dice: ‘Tengo unas cosas que decirle. ¿No se enoja?’ No, no, no, para nada, para nada, para nada. Dice: ‘Lo hago con respeto’. Sí, cómo no, le escucho.
Y entonces: ‘¿Por qué está destruyendo el país? ¿Usted sabe que es uno de los gobiernos más corruptos que ha habido en México? ¿Por qué quería o quiere destruir el INE? ¿Por qué las empresas están cerrando y no tienen empleo los trabajadores?’
Y me dice: ‘Se lo digo con respeto’. ¿Qué me puede usted decir? ¿Qué me contesta?, porque tengo otras cosas’. Le digo: No, ya con eso tengo. Le digo: Mira, lo que te puedo decir es que entre nosotros no nos vamos a poder entender porque somos distintos, y yo te respeto. Y qué bien que me planteas esto, también con respeto, pero no nos vamos a poder entender.
Me hablaste del bien común, le digo. Busca el origen del término, cómo se aplica en México. Y para qué te respondo, mejor sigue tu camino, ya no es posible que tu cambies ni yo voy a cambiar mi manera de pensar. Y lo único que me faltó fue decirle: Si tienes hijos, pues sí les daría yo tiempo para explicarle cosas a tus hijos.
Y sí le dije a la gente humilde, a la gente que le cuesta más trabajo obtener información, les dedico mucho tiempo, pero ya en tu caso para qué pierdo el tiempo, mejor vamos a respetarnos, no nos vamos a entender, son dos pensamientos completamente distintos.
02/01/2023