*El neoliberalismo no produce bienestar
Desde hace mucho tiempo hemos sostenido que el modelo neoliberal no produce bienestar, sino miseria pública, que no puede ser exitoso un modelo que sólo procura el lucro en beneficio de una minoría y a costa del sufrimiento de la inmensa mayoría del pueblo.
Esto ya no nosotros lo constatamos en nuestra historia, ya sabemos qué pasó durante el porfiriato, y neoliberalismo es neoporfirismo.
¿Qué sucedió en el porfiriato?
Pues el gobierno fue tomado, estuvo al servicio de un grupo y se esclavizó al pueblo y se acumularon grandes fortunas al amparo del poder público, pero se tenía al pueblo sometido.
¿Eso qué produjo, esa desigualdad?
Una revolución. Si hubiese funcionado ese modelo no hubiese habido revolución. Hay insensatos que dicen que fue un buen gobierno el de Porfirio Díaz; si eso fuese cierto, no hubiese habido una revolución social.
Es lo mismo de ahora. Se acumuló mucha riqueza en unas cuentas manos, sobre todo en el gobierno de Salinas, se transfirieron los bienes de la nación, los bienes públicos a particulares, se profundizó la desigualdad social.
México llegó a ocupar el cuarto lugar en el mundo en multimillonarios, cuarto lugar, sólo superado por Estados Unidos por Alemania y por Japón al final del gobierno de Salinas.
Entonces, esa desigualdad produjo todo esto que estamos ahora padeciendo, esa corrupción, porque llevar a cabo esas operaciones de traslado de dominio, pasar lo público a privado es corrupción, privatizar, lo hemos dicho varias veces, según el diccionario es convertir lo público en privado.
Entonces, eso es lo que se aplicó en el mundo, hace 40 años comenzó esa política neoliberal, hicieron ensayos en algunos países, incluso el modelo fue impuesto con dictaduras y aparentemente era la panacea, era la modernidad, ese modelo es el que se está derrumbando.
El coronavirus no produjo ese derrumbe, lo precipitó. Ya el modelo estaba dañado, tan es así que no sólo fue el coronavirus, vino la crisis de precios del petróleo y así ya es un modelo vulnerable, ante todo una epidemia, una crisis financiera, un fenómeno natural, ya se está cayendo.
Entonces tenemos que pensar en un modelo alternativo, desde luego fraterno, solidario, que no concentre la riqueza en unos pocos, sino que se busque una mejor distribución del ingreso, que no haya tanta desigualdad y que no se piense sólo en crecer por crecer, que no sea como una obsesión el crecimiento, sino que el crecimiento tenga como fin el bienestar.
¿Qué otras enseñanzas nos está dejando lo del coronavirus en el terreno médico, de salud?
Se abandonó la salud pública en el mundo. En ese escrito hablo de que en China, uno de los países que ha tenido más crecimiento en los últimos años, que se convirtió en la fábrica del mundo, de repente viene esta epidemia y tienen que hacer hospitales con urgencia y en Europa y en Estados Unidos escenas lamentables de enfermos esperando turno para entrar a unidades de terapia intensiva.
04-05-2020