La Iglesia Católica hace cada vez más evidente su posición en contra del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, y, aunque en sus homilías todavía no arrecian las voces clericales, en declaraciones públicas sí arremeten contra todo lo que huela a 4-T…
Para muestra solo dos ejemplos ocurridos desde hace dos semanas, cuando los obispos de Cuernavaca y Texcoco tronaron de forma estruendosa por la inseguridad que viven miles de familias que, incluso, han tenido que abandonar sus hogares para quedar a salvo de la delincuencia organizada…
“El país está cada vez más salpicado de sangre”, expresó con todas sus palabras el obispo de Cuernavaca el domingo antepasado, mientras que el obispo de Texcoco, Juan Manuel Mancilla Sánchez, tampoco se anduvo por las ramas y el miércoles siguiente dijo públicamente que “México está sometido a un poder maligno por la 4T”…
Ambas declaraciones sacaron ronchas en el cuartel morenista que comanda el dirigente nacional de ese partido, Mario Delgado Carrillo, según versiones recogidas por nuestros sabuesos informativos por esos rumbos…
Y vaya que no es para menos, pues saben que si la Iglesia se lo propone, sus obispos y demás pastores podrían influir con creces entre el electorado nacional para detener lo que llaman “cruel ineficiencia social de este gobierno”…
Interesante, ¿verdad?...