El pasado 13 de enero la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo declaró lo siguiente, sin reparar de posibles consecuencias y con todo lo que ello implica: “Soy la continuidad transformadora del presidente López Obrador y nunca romperé con él”…
Bueno, pues parece que esa advertencia se escuchó con mayor interés en el vecino país del norte y los hechos demuestran que hubo mayor atención a lo siguiente…
“Nunca jamás traicionaré al expresidente Andrés Manuel López Obrador”. Las señales indican que esta frase dolió en lo más profundo al presidente gringo Donald Trump, quien comienza a cumplir con puntualidad las amenazas que lanzó desde que fue elegido candidato presidencial para un segundo periodo…
Los hechos están a la vista y fue la primera vez que la mandataria mexicana confesó públicamente que ese fue el compromiso que estableció con quien considera su guía político...
Pero la siguiente frase de doña Claudia fue lo que al parecer hizo detonar las reacciones más violentas de don Donald: “Anhelan que yo rompa con el presidente López Obrador, pues se van a quedar con las ganas. ¡¿Cómo?! Si luchamos juntos toda la vida, si eso fue a lo que me comprometí con el pueblo, si es mi convicción darle continuidad a una transformación que inició en diciembre del 2018. Entonces, síganle, van muy bien”.
Y si alguien duda de los efectos que no asimiló Sheinbuam, haga clic aquí y escuche el profundamente reflexivo análisis del maestro Rodolfo Medina.