No solo de pan se vive, también la cultura es rica y México tiene mucha para dar

Por Alejandro Javier Ruíz Escalante

Nuevamente, como ha sucedido en otros sexenios, el rubro cultural sufre de la desatención por parte del Estado; y las instituciones encargadas de fomentar estas actividades, a nivel nacional e internacional, no tienen otra salida que ajustarse a la partida asignada. En este caso, se privilegian los programas sociales, y eso está bien, pero no sólo de pan vive una sociedad tan rica en tradiciones y cultura como la nuestra.

CULTUREANDO Por Alejandro Javier Ruíz Escalante

*La cultura descuidada 

Descuido, olvido, abandono y desaliño son las características con las que el Presupuesto de Egresos 2019 delinea el quehacer cultural de nuestro país.

Nuevamente, como ha sucedido en otros sexenios, el rubro cultural sufre de la desatención por parte del Estado; y las instituciones encargadas de fomentar estas actividades, a nivel nacional e internacional, no tienen otra salida que ajustarse a la partida asignada.

En este caso, se privilegian los programas sociales, y eso está bien, pero “no sólo de pan vive una sociedad tan rica en tradiciones y cultura como la nuestra”.

Si algún sector de la sociedad se mostró abiertamente en apoyo al cambio propuesto por el Movimiento de Regeneración Nacional, fue precisamente el académico y el cultural. Al primero, según noticias de última hora, les será reconsiderado “el error” que el presidente López Obrador acepta en la reducción de su presupuesto.

Buena medida, pero y el sector cultural sigue en su ruta de olvido, de omisiones y no cumplimiento. No obstante que significa una labor sustancial y de la que, no sólo afecta a los que viven de actividad cultural y la promocionan, sino a todos aquellos que tenemos derecho a conocer, acercarnos y disfrutar de la raíz formativa común que nos identifica como un pueblo basto en sus propuestas culturales.

Joaquín Cosío, en una entrevista en un noticiero matutino, expresó su protesta al recorte presupuestal a la cultura. En los asuntos de la cultura, afirmó el actor, toda la vida estamos haciendo más con menos. Hablando de su experiencia y trayectoria artística la cual siempre ha estado marcada por ese dar de más a pesar de los escasos recursos.

Hay desconocimiento, por parte de las autoridades, del trabajo que se desarrolla en el ambiente artístico, cultural, y por ello dejan de ver la importancia de esta necesidad social, terminaba afirmando el conocido actor.

Así las cosas, el recorte se parece a las medidas tomadas en otros sexenios, por ello no causa tanta sorpresa. Lamentablemente, a diferencia de lo que se esperaba en esta nueva administración, se repite la fórmula del abandono, la desatención, la dejadez, la inobservancia y el incumplimiento.

¿Será necesario actuar en bloque como lo hicieron las instituciones educativas? Pues entonces, será importante señalar que un pueblo inculto es un pueblo pobre, y de una pobreza en verdad lacerante, ya que no es el oro, recursos naturales o las extensiones territoriales lo que habla de la grandeza de un pueblo, sino su actitud y manifestación a través de su propia idiosincrasia, su forma de ser y sentir que se encuentra plasmada en su cultura.

Las tradiciones indígenas y urbanas están para conocerlas y difundirlas. Los ritos de purificación y permisos a la “Madre Tierra” van más allá de un mero apoyo a lo político. Se respeta a una nación integrando todas sus expresiones ancestrales y actuales modeladas en su cultura. 

Se ha anunciado una movilización para manifestar inconformidad y protesta a este recorte de presupuesto. Seis secretarios de cultura de diferentes estados se han constituido en la Asociación Mexicana de Secretarios y Titulares de Cultura, dispuestos a entablar pláticas con el Legislativo y con la Secretaría de Cultura Federal reclamando el subsidio, piso en materia cultural, y los recursos a proyectos etiquetados que manejaban los estados en su presupuesto. 

Se movilizarán al exterior de la Cámara de Diputados. Así que, en materia cultural que no se pida, por parte del ejecutivo, lo que el sector cultural está acostumbrado a dar.

Siempre en cultura se ha tenido que hacer lo más con lo menos y es la forma en que se ha venido dando el trabajo artístico –cultural en todos sus niveles. No se trata de un simple leit motiv, sino de un reclamo válido, justo y necesario que la comunidad cultural hace en quien se ha depositado la esperanza de un verdadero cambio. 

En todo caso, no se trata de hacer “más con menos”, sino dejar que la negligencia siga siendo la vara con que se mide lo cultural, por parte de un Estado que parece mantenerse ajeno y distante a este patrimonio social.

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