El presidente Andrés Manuel López Obrador lo anunció y lo está cumpliendo con la puntualidad que marcan los tiempos políticos…
Desde principios de este mes que está por terminar soltó las señales y semanas después echó a caminar su estrategia con los cambios en su gabinete…
Comenzó por despedir a la titular de la secretaría de la Función Pública Eréndira Sandoval Ballesteros y siguió con el reacomodo de las piezas en sectores que considera elementales para lo que fragua para el proceso electoral del 2024, cuando deberá salir de Palacio Nacional, si es que no le gana el apetito de la reelección…
Como parte de los movimientos de su ajedrez, figuran la actual secretaria de Seguridad Pública Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, a quien considera la más impoluta de su gabinete, y el senador Gabriel García Hernández, a quienes pretende integrar en una jugada que tiene preparada para que la encabece el secretario de Hacienda que en breve se convertirá en gobernador del Banco de México, Arturo Herrera Gutiérrez…
Para entender mejor lo anterior, cuestión de reflexionar lo que dijo don Andrés a principios de junio: “Vamos a esperar que pasen las elecciones, porque, de verdad, sí es un antes y un después, siempre ha sido así y ahora no es la excepción, siempre las elecciones intermedias son como el fin de un periodo y el inicio de otro”…
Así las cosas, no falta mucho para que el presidente realice otro reacomodo que sacará chispas entre los morenistas…